SEVILLA 2 Ene. (EUROPA PRESS) -
El proyecto promovido por Heineken para reformar los edificios Palomar y Mosaico de la antigua planta de Cruzcampo de la avenida de Andalucía, en Sevilla capital y crear un espacio de creación e innovación cervecera que acoja además la sede de la Fundación Cruzcampo avanza y las demoliciones acometidas hasta el momento en ambos inmuebles han "descubierto muros, estructuras y capas de historia hasta ahora desconocidas que dan fe de la histórica vinculación" entre la firma cervecera y la ciudad hispalense.
Según informa Heineken España en un comunicado, según el calendario previsto para el proyecto, el mencionado centro abrirá sus puertas a finales de este nuevo año "como un nuevo foco de actividad cultural, social, gastronómica y un espacio de referencia para los amantes de la cerveza". Se tratará, así, de "un nuevo referente para los amantes de la cerveza y un punto de interés único en la ciudad, en el que se volverá a elaborar cerveza en el lugar original donde nació Cruzcampo".
La iniciativa, según Marcos Tarancón, director de Relaciones Corporativas y Legal de la compañía, se inspira "en el legado de Cruzcampo, en nuestra historia y nuestra herencia para reconvertir estos edificios históricos en nuevos espacios contemporáneos, versátiles y abiertos a la ciudad y al servicio de todos los andaluces y visitantes, situando a Sevilla como capital cervecera del sur de Europa".
"Este ilusionante proyecto representa la gran apuesta de Heineken por Sevilla, el verdadero corazón de Cruzcampo. La intervención, que cuenta con una inversión de ocho millones de euros, transformará por completo nuestra sede para dinamizar la ciudad con un espacio de creación cultural, social, gastronómica y, por supuesto, maestría cervecera", afirma Marcos Tarancón.
Así, la empresa ha detallado que la fase de demolición que actualmente se está llevando a cabo en el interior de ambos edificios "ha descubierto muros, estructuras y capas de historia hasta ahora desconocidos, que dan fe de la histórica vinculación que Cruzcampo y Sevilla han compartido en estos edificios; memorias y vivencias que sientan las bases de las emocionantes experiencias que los visitantes podrán disfrutar en ellos".
Al respecto, la directora de la Fundación Cruzcampo, María Ángeles Rodríguez de Trujillo, ha recordado que el conocido como edificio Palomar acogerá la sede de la mencionada entidad, funcionando como "un espacio de aprendizaje abierto, un escaparate de creatividad y un altavoz del talento".
ACTIVIDADES Y "TRABAJO COLABORATIVO"
"En apenas un año, este lugar volverá a ser referente en innovación gracias la Fundación Cruzcampo, que desarrollará toda su actividad de apoyo al talento joven, la cultura, el emprendimiento y la hostelería desde una nueva sede de 2.000 metros cuadrados con un completo programa de actividades que incluirá exposiciones, talleres y seminarios, espectáculos y espacios de trabajo colaborativo, entre otras iniciativas", señala la empresa.
En cuanto al edificio Mosaico, recuerda la compañía que merced al proyecto ya en marcha, será un "espacio de creación cervecera y gastronómica de 1.400 metros cuadrados que albergará la Escuela de Hostelería Fundación Cruzcampo y una fábrica urbana de cerveza, que volverá a elaborar cerveza Cruzcampo en el lugar que la vio nacer en 1904".
"Aquí, el visitante podrá disfrutar de experiencias cerveceras y gastronómicas únicas, pero también de actividades culturales y de ocio que amplificarán las iniciativas desarrolladas en el Espacio Fundación. Se convertirá así en un lugar de encuentro, celebración, experimentación y creación abierto a las últimas vanguardias locales, nacionales e internacionales, manteniendo el espíritu innovador que siempre habitó entre sus muros".
Del mismo modo, precisa la empresa que las calderas Weigelwerk instaladas en los años 40 en este edificio que a partir de 1991 acogió el salón de la Fundación Cruzcampo han sido trasladadas a la actual fábrica de Heineken en Sevilla para su custodia durante las obras.