SEVILLA 13 Ago. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Confederación de Empresarios de Sevilla (CES), Miguel Rus, ha asegurado que la ciudad "no es competitiva urbanísticamente" y que en ese aspecto "tenemos que aprender mucho de Málaga, en costes, en el desarrollo y en la agilidad".
Así lo ha expresado el máximo responsable de la patronal en una entrevista concedida a Europa Press, en la que ha destacado que la población en Sevilla se reduce porque "no hay suelos para desarrollar, y los que hay no son atractivos".
Rus ha señalado, además, que esos suelos "tienen unas cargas urbanísticas que son el doble que las del área metropolitana". Asimismo, "los tiempos, los plazos y las garantías que piden son entre un 40% y un 100% mayores que en otros municipios similares, por lo que a los fondos (de inversión) eso no les interesa: no salen los números".
Por otra parte, Rus ha puesto en valor "a los que lo han hecho bien", como son los casos de "Tomares, Mairena, Dos Hermanas o La Rinconada, que han invertido los recursos para urbanizar los suelos".
En Sevilla "todo es más lento, más caro y complicado. Los fondos si no tienen la garantía urbanística total y los desarrollos no son claros y sencillos, no se mueven y es que con incertidumbres no se va a ningún sitio".
En opinión del presidente de la CES, el Ayuntamiento tiene que ser "mucho más líder" en el desarrollo urbanístico. "Ahora mismo, el único que hay en desarrollo PGOU de 2006 es el de Metrovacesa en Palmas Altas, que es una zona muy buena y con muchas posibilidades, como La Raza, Buenaire y San Nicolás".
En este sentido, Sevilla "debe tener un parque de viviendas con precios asequibles para la juventud para que se instalen en nuestra ciudad, con viviendas de protección oficial (VPO) y pisos públicos de alquiler".
De otro modo, "difícilmente superaremos de nuevo la barrera de los 700.000 habitantes si no somos capaces de atraer población como residentes, y para ello hay que facilitar el desarrollo de estas grandes bolsas de suelo de la ciudad".
UN SECTOR TURÍSTICO MÁS COMPETITIVO
El presidente de la Confederación de Empresarios de Sevilla ha afirmado en relación con el sector turístico que "no hay que cambiar el modelo sino hacerlo más productivo, más eficiente, más competitivo, más internacional y con empresas más grandes", entre otras cuestiones, puesto que la ciudad tiene "un potente sector, reconocido a nivel mundial, que lo ha pasado muy mal en la pandemia, pero que sigue tirando del carro".
Para Rus, el turismo sigue ejerciendo un importante "poder tractor" con el resto de los sectores económicos --servicios, comercio, agricultura, logística o construcción--.
"Antes de la crisis, este sector generaba más del 15% del Producto Interior Bruto (PIB), sin tener en cuenta la actividad y el empleo indirecto e inducido". Sin embargo, "nunca ha tenido una asignación presupuestaria acorde con su importancia y aportación como motor de riqueza y empleo en nuestra tierra".
Rus ha querido dejar claro que el hecho de que se busque "una Sevilla más industrial" no significa "que dejemos de lado al turismo". Al contrario, el turismo sevillano "tiene muchos retos por delante, hay que seguir dinamizando, innovando y diversificando en este sector. Hay que trabajar en las nuevas motivaciones del turista para que opte por nuestra ciudad como destino".
La patronal considera que es muy importante la ampliación del espacio turístico, "para que no se concentre", aumentando por ello la oferta de "atractivos visitables y tener más contenidos culturales, lo que llama a que los turistas alarguen su estancia".
"También es urgente la necesidad de afrontar la alta demanda de personas cualificadas para el sector, así como seguir impulsando la digitalización, tanto de las empresas, como de los territorios". Las administraciones, al respecto, "deben aunar esfuerzos" para el desarrollo proyectos de equipamientos e infraestructuras necesarios para impulsar el turismo y "la conexión de Santa Justa con el Aeropuerto es uno de ellos".
IMPLANTACIÓN DE LA TASA TURÍSTICA
Desde la Comisión de Turismo de la CES-Cámara, que representa a todos los empresarios del sector de Sevilla, se ha acordado "estar dispuestos a escuchar propuestas sobre la tasa turística, pero siempre bajo una serie de condiciones", y ello después de que el Pleno ordinario de Sevilla del mes de julio aprobara instar a ambos gobierno a crear el marco normativo necesario que permita su aplicación.
"El apoyo de la CES y de los empresarios del sector dependerá de cómo se recaude este impuesto, quién lo recaude --no sólo alojamientos hoteleros--, a quién se le cobre y cuál será su destino. Además, el coste de la recaudación, es decir, el servicio y los medios para el procedimiento de cobro, deben correr a cargo del Ayuntamiento".
De esta forma, los empresarios "no apoyarán la tasa si los recursos que se recaudan no se invierten en la mejora de la competitividad del destino turístico de Sevilla", ha añadido Rus. Además, "en ningún caso, este impuesto puede conllevar la reducción de las partidas de presupuestos habitualmente asignadas al turismo, que son de por sí escasas", pese a que genera "más del 15% del PIB sin tener en cuenta la actividad y el empleo indirecto e inducido".