SEVILLA 5 Sep. (EUROPA PRESS) -
El secretario general del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT), Óscar Reina, junto al histórico dirigente de este sindicato Diego Cañamero, ha encabezado una concentración ante las puertas de los Juzgados de lo Penal del edificio Noga de Sevilla, para defender que los 20 sindicalistas del SAT que serán juzgados por asaltar y sustraer varias mercancías un supermercado del municipio sevillano de Écija en 2012 realizaron un "acto simbólico" y no un robo con fuerza, delito por el que les acusa la Fiscalía.
En declaraciones a los periodistas, Cañamero ha indicado que el acto que los militantes del SAT llevaron a cabo en 2012 al "expropiar" alimentos en un supermercado es una "acción simbólica", a modo de denuncia ante la situación económica y social que sufría Andalucía, negando así que se tratara de un robo ya que "no hubo ánimo de lucro" y los alimentos "de primera necesidad" que se cogieron iban a ser destinados a servicios sociales.
Esta concentración se ha hecho con motivo de la celebración de una vista previa del procedimiento judicial en el cual la Fiscalía de Sevilla pide un año y seis meses de prisión al exconcejal de Jaén en Común en el Ayuntamiento de Jaén Andrés Bódalo, al alcalde de Izquierda Unida de Pedrera, Antonio Nogales, el exdiputado provincial de Sevilla por IU Manuel Rodríguez Guillén, al propio portavoz del SAT, Óscar Reina, así como a 16 sindicalistas más. Esta vista previa, convocada con el objeto de negociar una conciliación, ha quedado aplazado hasta febrero por la incomparecencia de algunos de los procesados.
Tanto Cañamero como Reina han lamentado la "persecución" a la que dice se está viendo sometido el sindicato y ha defendido la "acción simbólica" que los militantes del SAT llevaron a cabo en 2012 al "expropiar" alimentos en un supermercado a modo de denuncia ante la situación económica y social que sufría Andalucía.
"La denuncia que hicimos en estos establecimientos era porque había 400.000 familias andaluzas sin trabajo, sin ningún tipo de protección, que no podían pagar los suministros básicos y en situación de pobreza, por lo que no era ni robo ni violencia", ha asegurado Cañamero, quien ha añadido que "coger cuatro o cinco carros de comida para repartirlos simbólicamente en una barriada de familias necesitadas era para que se avergonzaran políticos y gobernantes, por lo que ni cabe violencia ni robo".
Preguntado por el forcejeo que se produjo el día de los hechos con una cajera del supermercado, Cañamero ha pedido tener en cuenta el contexto ya que "había que entrar, llenar los carros y sacarlos rápidamente para meterlos en una furgoneta" que esperaba en la puerta y "repartirlo a las familias necesitadas".
"Es verdad que algunas cajeras intentaron evitar que secuestráramos o expropiáramos esa comida; les pido disculpas y les digo que si alguna vez necesita a este sindicato aquí estamos para defenderlas", ha indicado. Además, ha subrayado que "fue una estupidez lo que ocurrió allí, pero con ninguna intencionalidad por lo que no se puede considerar un robo con violencia".
Al hilo, el que fuera diputado por Unidos Podemos ha dicho que "una pena de un año y medio de cárcel más una multa con todo lo que está pasando en la sociedad es una auténtica barbaridad" cuando "hay gente que se lleva el dinero a paraísos fiscales y casos de corrupción, y ninguno va a la cárcel o lo hacen muy poco tiempo". Además, ha criticado la pena de cárcel pedida por "una acción simbólica" cuando estas superficies comerciales "tiran todos los días la comida a la basura por su caducidad".
"Se quiere criminalizar la acción de este sindicato que lleva 40 años luchando y va a seguir haciéndolo; si hay cárcel estamos dispuestos a pagar ese precio pero la dignidad y la justicia están por encima de todo", ha concluido Cañamero.