Los forenses que hicieron la autopsia al cadáver dicen que el fallecido tenía "bastante mermada" su capacidad de defensa cuando fue estrangulado
SEVILLA, 17 May. (EUROPA PRESS) -
La Fiscalía de Sevilla ha mantenido este miércoles su petición de ocho años y medio de cárcel para María del Carmen Q.B., la mujer acusada de la muerte de un hombre de 62 años que fue encontrado sin vida el día 9 de enero de 2016 en un congelador de la heladería 'Otoño' del barrio de la Macarena.
Durante la tercera sesión del juicio con jurado popular que se celebra en la Audiencia Provincial de Sevilla, el Ministerio Público ha elevado a definitiva su petición para la acusada de ocho años y medio de prisión por un delito de homicidio con las atenuantes de confesión, por haber acudido a la Comisaría de Dos Hermanas para confesar el crimen, y la de hallarse bajo la influencia de bebidas alcohólicas.
De su lado, las dos acusaciones particulares que representan a los cinco hijos y a la mujer de la víctima han mantenido su petición para la imputada de 20 años de cárcel por un delito de asesinato, mientras que la abogada de María del Carmen ha solicitado para su patrocinada la imposición de un máximo de cinco años de cárcel por entender que se trata de un homicidio con la atenuante de confesión y las eximentes de legítima defensa y consumo de alcohol.
En la vista oral, han declarado este miércoles los dos médicos forenses que practicaron la autopsia al cadáver, que han enmarcado la muerte en una situación en la que "dos personas están luchando e intercambiando golpes" y que han indicado que existió una "cierta diferencia de fuerzas" entre la agresora y la víctima, que pesaba 60 kilogramos y medía 1,55 centímetros.
Los forenses han relatado que, en el marco de esta discusión, la víctima recibió un golpe en la cabeza con un objeto "irregular" el cual "no le produjo la muerte", sino "una conmoción cerebral recuperada", lo que quiere decir que la persona sufre "una pérdida de conocimiento y luego se recupera espontáneamente".
De este modo, según han agregado los forenses, el fallecido se encontraba en una situación "de franca debilidad y disminución de su nivel de conciencia" cuando fue estrangulado supuestamente con unos cables por la acusada. "Su capacidad de defensa estaba bastante mermada", han opinado los médicos, que no han podido determinar si la víctima estaba inconsciente cuanto fue estrangulada.
Asimismo, han indicado que la víctima presentaba "múltiples contusiones" por su cuerpo.
UN AGENTE DICE QUE LA ACUSADA ESTABA "MUY, MUY BORRACHA"
Por su parte, el agente de Policía que tomó declaración a la acusada cuando ésta se presentó en la Comisaría de Dos Hermanas para confesar los hechos ha asegurado que se trató de una declaración "espontánea" y que la imputada estaba "muy, muy borracha".
Según ha dicho el agente, la acusada "no estaba en condiciones de hablar" y una de las cosas que se le entendía decir era que "había matado a un hombre", afirmando que no cree que entendiera los derechos que le leyeron cuando procedieron a su detención dado el estado en el que se encontraba debido al alcohol consumido.
En la jornada de este jueves, tanto la Fiscalía como las acusaciones particulares y la defensa de la acusada expondrán sus conclusiones definitivas.
Ayer martes, los dos hermanos de María del Carmen aseguraron que ésta les llamó por teléfono tras ocurrir los hechos y les dijo que era un "monstruo" y que "la llevaran a la Policía" para confesar el crimen.