UGT-A y CCOO-A defienden el decreto de reordenación y plantean propuestas conjuntas para "mejorar y ofrecer más control"

Actualizado: martes, 11 enero 2011 16:30

SEVILLA 11 Ene. (EUROPA PRESS) -

Los sindicatos UGT-A y CCOO-A han defendido el decreto ley de reordenación del sector público de la Junta, "en aras del interés de los empleados públicos y también del interés general" y han presentado en su comparecencia parlamentaria en comisión un documento con contenidos pactados y propuestas conjuntas para que sean aceptadas como enmiendas por los grupos, con vistas a "mejorar el texto del decreto y ofrecer más garantías y mayor control de los derechos".

Tanto, el vicesecretario general de Relaciones Laborales y Política Institucional de UGT-A, Dionisio Valverde, como el adjunto a la secretaría general de CCOO-A, Rafael Aljama, han aludido, en sus respectivas intervenciones en comisión para analizar el decreto ley de reordenación, a un documento conjunto de ambos sindicatos que incluye las propuestas de modificación al texto en su tramitación como proyecto de ley, para incorporarlas como posibles enmiendas, unas sugerencias que tienen como base el texto del acuerdo del 29 de octubre entre Junta, CCOO y UGT, ya que "hay elementos de ese acuerdo que no recoge el proyecto de ley o lo hace de forma inadecuada", así como otros asuntos de mejora de la redacción.

Para Rafael Aljama, estas propuestas "aseguran mecanismos de participación y control y resuelven temas específicos de colectivos muy puntuales".

Entre esas propuestas, ambas centrales demandan que el 1 de enero de 2013 "debe estar concluida la convergencia de las condiciones de trabajo del personal que presta sus servicios en las agencias" y piden que en caso contrario, "se establezcan para todo el personal las condiciones más beneficiosas de carácter colectivo que se estén aplicando entre los diferentes grupos".

Además, piden que se reconozca al personal laboral que se integre en una agencia pública empresarial, la experiencia previa cuando participe en convocatorias públicas, a efectos de retribuciones o reconocimiento de trienios.

Asimismo, demandan que al personal laboral de la Junta que se integre en una agencia de régimen especial le sea de aplicación de forma indefinida, el convenio colectivo de la Junta, mientras que al personal funcionario que se integre orgánicamente en una agencia de régimen especial o se adscriba funcionalmente a una agencia pública empresarial le sea de aplicación el acuerdo de condiciones de trabajo del personal funcionario de la Junta.

El vicesecretario general de Relaciones Laborales y Política Institucional de UGT-A, Dionisio Valverde, quien ha pedido se simplifique el nombre de la ley, ha puesto en valor la importancia de los servicios públicos y ha recordado que el sindicato viene rechazando "sistemáticamente" la privatización y externalización en los últimos 20 años y ha sido partidario de una reordenación del sector público andaluz "tanto en períodos de bonanza como de crisis".

Para Valverde "en este tiempo hemos tenido presente el servicio a lo público y el interés general" y ha defendido esta reordenación "que es la más pública y la menos lesiva para el interés general, pues supone el mantenimiento de la prestación de servicios públicos, y es la que mejor preserva derechos y condiciones de trabajo, pues las otras alternativas que se plantean pasan por la privatización o externalización privada y se deterioran las condiciones".

"FUIMOS LOS PRIMEROS EN IR CONTRA EL DECRETO"

Valverde considera que "el bien intencionado proceso de reordenación ha estado plagado de errores desde un principio, como hacer creer que se pretendía sólo un ahorro de gastos o apenas justificarlo para tramitarlo por el decreto ley", de manera que UGT y CCOO "fueron los primeros en rechazar el decreto ley de reordenación, y al rebufo de nuestra respuesta comenzaron a apuntarse otros sindicatos, partidos y plataformas contra la reordenación".

De esta forma, precisó que UGT y CCOO fueron "los primeros en convocar las movilizaciones contra este decreto ley", aunque se iniciaron negociaciones que culminaron en un acuerdo "donde se recogen las exigencias de los sindicatos y se nos da garantía de que no se perderán derechos ni verán mermadas sus condiciones".

No obstante, ha lamentado la actitud de otras formaciones "e incluso se han producido agresiones a trabajadores" y han recordado que "incluso se sumaron fuerzas políticas para sacar rédito político", tras lo que ha negado la mayor, ya que "al defender la reordenación no es defender el enchufismo sino evitar la externalización y la privatización".

Valverde ha lamentado el "ruido" desde las distintas organizaciones, plataformas y partidos, desde donde "se han estado vertiendo mentiras y medias verdades", por lo que le pidió a la Junta que "impulsara el decreto ley como proyecto de ley para debatir de forma abierta sobre la reordenación".

El representante de UGT-A ha apuntado además algunas de sus sugerencias para que, a modo de enmiendas, se introduzcan en el decreto ley, como es la referencia a la estructura de negociación colectiva en el sector público andaluz, que se recoja la obligación de negociar con los firmantes de ese acuerdo los estatutos, o que en la integración voluntaria del personal funcionario a la agencia pública empresarial se incorpore el tipo de contrato que se negocie con estos dos sindicatos.

Asimismo, reclama una redacción "más acertada y para no generar agravios comparativos con posteriores reordenaciones" y que se recoja las condiciones laborales para el personal laboral, que sí están recogidas para los funcionarios. En ese sentido, ha apuntado que el personal laboral de la Administración General "deberá pasar obligatoriamente a las agencias especiales, en concreto a la de empleo y agricultura, y verá sustituidas sus actuales condiciones por la que se establezcan en un futuro convenio, lo cual abre una indeterminación donde sus derechos pueden verse afectados".

"Estamos convencidos de que esta reordenación era y es necesaria, aunque con ella no se acaban los problemas de la Junta y se necesitará una siguiente fase o las que sean necesarias", ha considerado Valverde, para el que esta reordenación "tiene efectos colaterales que hay que resolver y hay cuestiones que mejorar".

PRECIPITACIÓN INICIAL

Por su parte, en su intervención, el representante de CCOO-A considera que esta comparecencia "se tenía que haber producido mucho antes de aprobar el decreto ley pero la prisa injustificada llevó a una precipitación para aprobar mediante decreto este documento, sin abordar negociación con agentes sociales, cuando no había ninguna justificación para esa prisa".

"Esa precipitación llevó a un cúmulo de errores pero además por otro lado ha existido una manipulación tendenciosa e interesada", ha agregado Aljama, quien lamentó que existieran "enfrentamientos y amenazas incluso entre trabajadores".

Aljama quiso dejar claro la defensa de lo público "desde el interés de sus trabajadores pero también desde el interés general" y puso en valor el acuerdo del 29 de octubre entre Junta y UGT y CCOO, "que hizo rectificar a la Junta y restituir derechos de trabajadores".

Tras recordar que CCOO se posicionó desde un inicio diciendo que el decreto "debía ser negociado", lamentó la "tremenda torpeza en su desprecio al diálogo, negándose a tramitarlo como proyecto de ley", lo que motivó una campaña movilizadora que culminó en septiembre, tras lo que se inició la negociación, que culmina con un acuerdo el 29 de octubre.

Aljama considera que "lo público está en peligro, tanto el empleo como la prestación de servicios" y ha mostrado su preocupación por que puedan abrirse caminos diferentes de reordenación como el de Murcia.

"Es necesario que se alcance el máximo consenso público en este modelo útil y que éste se blinde ante tentaciones de deteriorar lo público y la avalancha privatizadora de aprovechar la crisis para defender que lo privado es mejor que lo público", ha advertido.