SEVILLA 11 Nov. (EUROPA PRESS) -
Unicaja y Cajasol prevén no seguir con la idea de emprender una fusión entre ambas cajas, según han confirmado a Europa Press fuentes del sector, después de que ambas entidades emprendieran sendos estudios sobre la viabilidad y los efectos económico-financieros de un potencial proceso de integración.
Varias fuentes financieras consultadas por Europa Press han indicado que Unicaja y Cajasol han desistido del proceso por el hecho de que "no se ha llegado a un acuerdo para hacer una fusión paritaria y entre iguales entre ambas cajas" y a la existencia de "diferencias" entre las dos entidades.
Asimismo, otras fuentes consultadas han atribuido esa negativa a la existencia de un "excesivo" solapamiento de sucursales, han indicado un "alto coste laboral" y algunos aspectos sobre retribuciones, entre otras cuestiones.
Ante esto, según las fuentes, los órganos reguladores han planteado a ambas entidades "buscar otras alternativas", que podrían pasar en un primer momento por una 'fusión fría' o Sistema Institucional de Protección (SIP) entre ambas cajas, ante lo que las fuentes precisaron que "el Banco de España no ve con buenos ojos los SIP de cajas de la misma comunidad autónoma".
Por ello, fuentes consultadas han indicado que "Cajasol puede tener más avanzada su integración en un SIP ya existente o la conformación de un nuevo SIP", para lo cual "mantiene conversaciones" con varias entidades al respecto.
El pasado mes de julio, los presidentes de Unicaja, Braulio Medel, y Cajasol, Antonio Pulido, comunicaron a sus respectivos consejos de administración el inicio de los estudios con vistas a suscribir un protocolo de intenciones que sirviera de base para la fusión.
Así, existieron pronunciamientos verbales o declaración de intenciones por parte de ambos presidentes, que pusieron en conocimiento del consejo la "voluntad de analizar la viabilidad de acudir a un proceso de fusión". Comunicaron de esta forma el inicio de los análisis y estudios de cara a suscribir un futuro protocolo de intenciones "que sirva de base para la integración de ambas entidades, y que permita unos mejores niveles de solvencia, rentabilidad y eficiencia de la misma en beneficio de sus clientes y empleados y la mejor contribución al desarrollo socioeconómico de Andalucía.
Tras dichos pronunciamientos, Unicaja decidió encargar a la empresa de consultoría Boston Consulting Group (BCG) la realización de un estudio de viabilidad y efectos económico-financieros de un potencial proceso de integración con Cajasol, tanto bajo la forma de una fusión como de un Sistema Institucional de Protección (SIP).
Por su parte, Cajasol aseguró entonces que tenía "prácticamente ultimado" un informe, encargado a la consultora KPMG, sobre la viabilidad y situación económica y financiera de una posible unión con Unicaja, donde se analizaron las diferentes ratios, volúmenes de negocio y niveles de solvencia y morosidad de ambas cajas.