SEVILLA 30 Sep. (EUROPA PRESS) -
La asociación conservacionista WWF ha agradecido la "buena labor" del ya ex director de la Estación Biológica de Doñana (EBD), Juan José Negro, cuyo cese ha sido confirmado por parte del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).
En declaraciones a Europa Press, el coordinador de la Oficina Técnica de WWF en Doñana, Juan José Carmona, ha expresado en este sentido su esperanza de que el cese no sea "un castigo por su postura tan clara y ejemplar en la gestión de Doñana en asuntos como el dragado del Guadalquivir, la reapertura de las minas de Aznalcóllar o la reclamación de fondos para que pueda seguir la Estación Biológica de Doñana".
"Esperemos que el cambio de director no suponga un cambio de postura en la gestión, después de que Negro se haya manifestado en contra y muy claramente en relación a proyectos que son negativos para Doñana", ha añadido Carmona.
Al respecto, desde el CSIC no se han facilitado las razones que han motivado esta decisión. De hecho, el propio Negro asegura desconocer los motivos de la destitución, de la que se ha enterado esta semana y que le ha sido comunicada oficialmente por correo.
En declaraciones a Europa Press, el hasta ahora director de la Estación Biológica de Doñana ha asegurado que "no tiene ni idea" de los motivos. Negro, que llevaba más de tres años al frente de la EBD, ha destacado la importancia de este centro, el cual cuenta con la distinción Severo Ochoa, y ha remarcado que, pese a la crisis económica, lo ve "en una situación fuerte y bien situado como centro de recursos naturales".
Ha subrayado que ahora se va a dedicar a la investigación --aspecto que "no ha dejado nunca"-- sobre proyectos relacionados con la conservación.
Recientemente, Negro ha saltado a la palestra de la opinión pública al declarar como testigo, en calidad de experto, ante el Juzgado de Instrucción número 3 de Sevilla por la causa donde se investiga la adjudicación a la agrupación empresarial México-Minorbis de los derechos de explotación del yacimiento minero de Aznalcóllar (Sevilla).
Así, ratificó que el proyecto de Minorbis contenía "errores aritméticos" en sumas de cantidades en volúmenes de agua, concretamente "en lo que tiene que ver con aguas superficiales y en algunos parámetros que tienen importancia en la configuración final del ciclo del agua".