Profesora señala en la UNIA que el uso de tecnología en las aulas "se ha masificado" y ha afectado a habilidades básicas

BAEZA (JAÉN), 6 (EUROPA PRESS)

La doctora y graduada en Educación Infantil por la Universidad de Jaén (UJA) Inmaculada García ha subrayado este viernes que el uso de dispositivos móviles en la docencia "se ha masificado" tras la pandemica y ha resentido algunas habilidades instrumentales de los alumnos porque, aunque su correcto uso ayude a "mejorar y revitalizar" el proceso de aprendizaje, su aplicación en esta etapa no fue "óptima" porque "muchos no estaban preparados para introducirlos en la enseñanza".

En una entrevista concedida a Europa Press, la ponente de la conferencia 'Uso de dispositivos móviles en las aulas' que se ha celebrado en el marco del curso de verano 'Recursos y metodologías activas en el proceso enseñanza-aprendizaje para la mejora de las competencias profesionales de los docentes y discentes' en la sede Antonio Machado de la Universidad Internacional de Andalucía (UNIA) en Baeza (Jaén) ha explicado que en la misma se enseñará la importancia que tiene el uso de las metodologías y estrategias a la hora de impartir clases y el papel de la tecnología y los dispositivos móviles en el sistema educativo y la forma de implantarlos en el aula según la normativa de la Junta de Andalucía.

Uno de los "caballos a batir" de la enseñanza, ha señalado, es el "mal uso" de la tecnología, pues los dispositivos móviles "mejoran y revitalizan el proceso de aprendizaje" si se usan de una manera adecuada. "La Junta de Andalucía en muchos centros dota de material tecnológico para introducir estas herramientas en el proceso de aprendizaje, y esos ordenadores están capados con una serie de restricciones", ha comentado.

Tras la pandemia, ha reconocido, el uso de la tecnología en la docencia "se ha masificado", ya que la circunstancia provocó que se empleara la tecnología cuando "muchos no estaban preparados" y, por ejemplo, habilidades instrumentales como la matemática o la lectura, "se han visto resentidas" porque no puede haber un control sobre la atención y el monitoreo y hace falta un "buen uso" con actitud.

La tecnología, ha subrayado, se debe ir incorporando en la enseñanza "poco a poco", hasta que se desarrollen una serie de habilidades y los alumnos adquieran la "madurez necesaria" para hacer un buen uso de ella. Y esta misma puede ser "útil" si se usa como complemento a los libros de texto para buscar información complementaria pero, ha vuelto a apuntar, hay que enseñar a los alumnos a usarla de manera adecuada.