Quiere ser una "opción más en la agenda semanal" de los zaragozanos y contribuir a enriquecerles
ZARAGOZA, 15 Jul. (EUROPA PRESS) -
El primer año del Alma Mater Museum, un proyecto que ha supuesto el cambio de denominación del Museo Diocesano de Zaragoza y un nuevo concepto expositivo y divulgativo, ha permitido duplicar el número de visitantes, rejuvenecer su perfil, atraer nuevos públicos y adaptar sus contenidos a colectivos en riesgo de vulnerabilidad.
Entre enero y junio de 2017, se han alcanzado los 10.931 visitantes, un incremento del 80 por ciento sobre el mismo periodo de 2016, cifra que supera el número total de 2015, cuando hubo 9.907, y prácticamente se alcanza la cifra total de 2016, 11.093. En el último trimestre del año pasado hubo un incremento del 120 por ciento.
La responsable técnico del museo, Pilar Muniesa, ha detallado en declaraciones a Europa Press que "si se sigue manteniendo la tendencia, acabaremos el año con el doble de visitas que en 2016".
Fue el 29 de junio de 2016 cuando se presentó esta iniciativa, en un acto que contó con la presencia del ecónomo del arzobispado, Ernesto Meléndez; el director científico del Alma Mater, Domingo Buesa; el director de comunicación del arzobispado; José Antonio Calvo; de las técnicos de Patrimonio de la Archidiócesis, María Rosa Arnal y María Carmen Aguilar; y de la responsable técnico del museo, Pilar Muniesa.
Doce meses después, el director científico del Alma Mater, Domingo Buesa, ha señalado que el museo "ha tenido desde sus orígenes una clara vocación de innovación y de apuesta por la investigación en asuntos museográficos desde el convencimiento de que estos espacios no son las piezas, sino los visitantes que construyen el recorrido emocional".
Por su parte, desde el Arzobispado de Zaragoza han explicado que en este primer año se ha conseguido el objetivo de "cambiar la estructura de lo que se suele entender por un museo, para enriquecer la oferta de contenidos, aportando una visión más amplia y contribuyendo a que sea más útil para la sociedad".
Según han expuesto, la finalidad es llegar a la mayor parte de la sociedad, para "mejorarla" a través de la cultura, partiendo del Alma Mater Museum como "centro dinamizador" de la misma dentro del "compromiso con las personas" y del trabajo colaborativo con diferentes entidades, algo que están realizando "no solo de palabra, sino con acciones" ya que desarrollar este proyecto está suponiendo "una importante inversión de cursos y en capital humano".
Asimismo, han recordado que el Alma Mater Museum está dentro de una marca global que se puso en marcha al mismo tiempo que la renovación de este espacio, Alma Mater, que aglutina toda la oferta cultural de la Archidiócesis y que se va a ir desarrollando progresivamente, "para estar presentes en todas las parcelas de la sociedad y no solo en la más conocida, como es la labor asistencial".
PROGRAMACIÓN ACTIVA
La responsable técnico del museo, Pilar Muniesa, ha manifestado que "la acogida de las nuevas actividades ha sido muy positiva y denota que la sociedad zaragozana demanda una programación activa en los museos, que le aporte un medio para pasar su tiempo de una forma diferente y enriquedora".
Entre la nueva oferta, se encuentran los talleres en familia, las visitas panorámicas por la ribera del Ebro y el proyecto Resiliarte, pionero en España en el uso terapéutico e integrador del arte y que en su primer año como experiencia piloto ha acercado los contenidos del museo a unas 500 personas, en colaboración con Proyecto Hombre, Hospital San Juan de Dios de Zaragoza, Asociación de Familiares de Personas con Autismo de Aragón y Plena Inclusión Aragón.
Muniesa ha precisado que antes de impulsar esta iniciativa visitaban el museo unos tres grupos al año con usuarios con enfermedad mental o algún tipo de discapacidad, sumando unos 50 visitantes al año. También ha remarcado que parte del éxito de Resiliarte es el trabajo conjunto con los equipos técnicos de las diferentes entidades con las que se colaboran, que aportan sus conocimientos especializados.
INTERACCIÓN
La responsable técnico del museo ha comentado que las nuevas actividades permiten una acción interactiva del visitante y ha subrayado que el Alma Mater Museum ofrece muchas posibilidades gracias a las cerca de 300 piezas que reúne de diferentes etapas de la Historia y del devenir del propio edificio que lo acoge, que es la parte más antigua del actual Palacio Episcopal y fue residencia de los Reyes de Aragón. Se alza sobre lo que fue la Basílica del Foro Romano y está a orillas del río Ebro.
Según ha apuntado, el verano pasado se pusieron en marcha los talleres familiares, que se ofrecen una vez al mes y se repiten cada cuatro meses, que han hecho que algunas familias se hayan convertido en habituales del museo porque desean hacer algo entretenido juntos e incentivar el amor por la cultura en los menores.
Uno de ellos se apoya en la "amplia colección de retratos" que posee el museo, entre ellos el que Francisco de Goya realizó a Joaquín Company, en los que las familias deben buscar determinados elementos y luego realizan su propio retrato.
En otro taller, a cada familia se le asigna un color, que ha de encontrar en determinadas obras, algo que sirve para explicar el uso y simbología de los colores en la pintura, tras lo que los participantes acaban haciendo un mural.
Por otra parte, ha indicado que antes de la puesta en marcha del Alma Mater Museum se realizan talleres infantiles en momentos puntuales del año, mientras que ahora se celebra uno al mes, a los que también se suman las visitas temáticas por la ribera del Ebro, que permiten dar a conocer la historia de la ciudad a través del edificio y del entorno, así como su fauna y flora.
De esta forma, también se abre este espacio al exterior y se incide en el concepto de "museo abierto" y en cómo afecta el entorno en la propia construcción del edificio.
En este punto, Muniesa ha subrayado que el edificio y las piezas que alberga "forman parte de la Historia" de la ciudad y de Aragón y desde el Arzobispado han comentado que la Iglesia ha sido "motor" de la misma y de la cultura en el pasado, como también lo son del presente y su acción "forma parte de nuestras raíces" por lo que ha apostado por divulgarla y contribuir a comprenderla.
Por su parte, Muniesa se ha marcado el reto de "integrar el museo en la vida ordinaria" de forma que sea una "opción más en la agenda semanal" de los zaragozanos y contribuir a enriquecerles culturalmente.
En este contexto, este primer año del Alma Mater Museum también se han suscrito colaboraciones con entidades como la Universidad Popular, la Universidad de la Experiencia y la Universidad San Jorge y forma parte del programa de visitas guiadas de escolares del Departamento de Educación del Gobierno de Aragón. Actualmente, se trabaja en nuevos acuerdos con obras entidades educativas.
SALA IDENTITAS
Otra de las novedades de este primer año ha sido la inauguración en octubre de 2016 de la sala 'Identitas', que alberga la exposición permanente 'La firmeza de un carácter', donde se proyecta un audiovisual de Javier Jiménez y Raúl Calavia que ha sido galardonado con el Delfín de Oro en el Cannes Corporate Media & TV Awards, festival internacional de cine corporativo publicitario.
Igualmente, en este primer año se han organizado seis exposiciones temporales con la colaboración de diferentes entidades, dinamizando este tipo de colaboraciones.
El horario del museo es de 10.00 a 20.00 horas, de martes a sábado, y de 10.00 a 14.00 horas, los domingos. La entrada cuesta 3 euros y 5 si se hace visita guiada. La reducida es de 3 euros para grupos concertados de más de 12 personas, mayores de 65, menores de 18, titulares de carnet joven, titulares del carnet de estudiante, minusválidos y familias numerosas. Es gratuita para sacerdotes diocesanos, niños hasta 7 años y desempleados.