Beamonte (PP) garantiza que los centros especiales de empleo seguirán teniendo apoyo

ZARAGOZA 13 Sep. (EUROPA PRESS) -

El presidente del PP Aragón, Luis María Beamonte, ha asegurado que los centros especiales de empleo seguirán teniendo apoyo en este "momento muy singular" de la economía. Ha visitado el Centro 'Oliver', de ATADES, en este distrito de Zaragoza, acompañado por la portavoz parlamentaria del PP, Mar Vaquero, y el presidente provincial, Javier Campoy.

En declaraciones a los medios de comunicación, Beamonte ha puesto de relieve la "competitividad" de los empleados, que "no solamente consiguen producir", sino que lo realizan "a buen precio y de una manera tan importante", resaltando la labor social del Centro y "la obligación de colaborar desde el conjunto de las instituciones públicas".

Ha resaltado que el Centro Especial de Empleo 'Oliver' trabaja para la empresa Teka con más de 200 referencias y ha resaltado el elevado número de empleados con que cuenta este Centro.

El dirigente del PP Aragón ha recordado que este partido ha exigido "constantemente" al Gobierno de Aragón que lleve a cabo una política económica con una "senda clara" porque actualmente "vivimos de momentos-anuncio", preguntándose qué situaciones de las anunciadas se han trasladado a la realidad.

COMPLEJIDAD

Por su parte, el presidente de Atades, Jesús Soto, ha explicado que este centro comenzó su actividad en los años 70 del siglo XX como taller ocupacional y en 2001 se convirtió en centro especial de empleo "siguiendo bajo el paraguas de Atades", aunque se segregó de la entidad y empezaron a fabricar puertas y frontales de los hornos de Teka.

"Entonces había unos módulos muy sencillos y se hacían con la gorra, pero ahora hay una complejidad tremenda y cada día se requiere más mano de obra", ha continuado Soto, quien ha apuntado que el Centro 'Oliver' ha pasado de 140 a 201 empleados, de forma que "estamos creando empleo constantemente", lo que "en estos tiempos no es poco" y para este colectivo "significa muchísimo".

"El único problema es que casi dependemos de un cliente único" y los responsables quieren diversificar para crear más puestos de trabajo. De los 201 trabajadores, el 80 por ciento son discapacitados intelectuales o tienen enfermedad mental y el resto "son especializaciones muy concretas".