ZARAGOZA, 7 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Plan Director de la Cooperación Aragonesa para el Desarrollo 2016-2019 ha dado un paso más. El Consejo Aragonés de Cooperación para el Desarrollo, órgano de consulta y asesoramiento en materia de solidaridad internacional y cooperación para el desarrollo, ha informado favorablemente sobre su contenido.
Dicho Plan deberá ser aprobado por el Consejo de Gobierno del Ejecutivo aragonés para su posterior remisión a las Cortes. El director general de Participación Ciudadana, Transparencia, Cooperación y Acción Exterior, Miguel Miranda, ha destacado el alto grado de participación de administraciones, entidades, agentes sociales y Universidad de Zaragoza, entre otros, en la elaboración de esta iniciativa.
Este Plan Director se contextualiza en la fase inicial de implementación de una nueva agenda acordada por la Asamblea General de Naciones Unidas, la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. En ella, se establecen los llamados Objetivos de Desarrollo Sostenible que tienen por objeto poner fin a la pobreza y el hambre, combatir las desigualdades, construir sociedades pacíficas, justas e inclusivas, proteger los derechos humanos y promover la igualdad entre los géneros, así como garantizar una protección duradera del planeta y sus recursos naturales.
Con este Plan, la cooperación aragonesa hace suyo el compromiso reflejado en la resolución de Naciones Unidas. Para ello, recoge las prioridades geográficas y sectoriales que orientarán el trabajo en la comunidad en este periodo.
PRIORIDADES GEOGRÁFICAS
En lo que se refiere a las prioridades geográficas, se ha querido dar continuidad a los procesos ya iniciados, dada la experiencia acumulada. Así, se mantienen como países y poblaciones prioritarios, determinadas zonas de Bolivia, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y República Dominicana, en Iberoamérica.
En África subsahariana, se dará prioridad al trabajo en Chad, Senegal, Etiopía, Malawi y República Democrática del Congo. Asimismo, se incluye la colaboración con los territorios administrados por la Autoridad Palestina, con la población saharaui y países en desarrollo con conflictos.
También se establecen unas prioridades sectoriales. La cooperación aragonesa concentrará sus esfuerzos en los servicios sociales básicos (vivienda, salud, alimentación y educación), el fortalecimiento de las estructuras democráticas y de las infraestructuras económicas, el enfoque de género que promueva la participación equitativa e igualitaria en los procesos de desarrollo y la sostenibilidad ambiental.
Miguel Miranda ha destacado entre las actuaciones recogidas en el plan, las relativas a la educación para el desarrollo en el ámbito de Aragón. De hecho, con el plan director se adquiere el compromiso de elaborar una Estrategia de Educación para el Desarrollo. "Hay que reforzar la sensibilización de la sociedad en todos los tramos de edad", ha insistido.