ZARAGOZA 6 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Dirección General de Consumo del Gobierno de Aragón ha analizado las condiciones de venta de los cigarrillos electrónicos en la Comunidad autónoma.
Dado que este producto está siendo "cada vez más utilizado", ha apuntado el Departamento Sanidad, Bienestar Social y Familia, la iniciativa busca proporcionar información sobre su venta en comercios no especializados, su uso, en lugares públicos o de trabajo, y su utilización como método para dejar de fumar cigarrillos tradicionales.
Sin actuar en aspectos sanitarios, Consumo ha comprobado las garantías de los derechos de los consumidores en la información y venta de estos productos.
Además, los casos de publicidad o cartelería con atribución de efectos beneficiosos para la salud han sido trasladados a las autoridades de salud pública.
De esta forma, se ha actuado sobre estancos y tiendas que venden cigarrillos electrónicos, ya sea de forma exclusiva o entre otros productos.
REQUISITOS INFORMATIVOS
La Dirección General de Consumo ha comprobado los requisitos informativos de los establecimientos que venden cigarrillos electrónicos.
De esta forma, ha concluido que en tres de cada cuarto tiendas figura el precio de los productos expuestos a la venta y en nueve de cada diez se informa a los usuarios de la dirección postal y teléfono o mail del responsable, por si el consumidor quisiera interponer cualquier reclamación.
El 62 por ciento dispone, además, de 'Hojas de Reclamaciones' y prácticamente el 70 por ciento tienen un cartel anunciador de las mismas.
En lo relativo a los justificantes de pago, el 92,5 por ciento de las tiendas entrega factura o justificante al consumidor y en nueve de cada diez documentos donde consta toda la información preceptiva (titular, fecha, conceptos e IVA desglosado).
Por si hubiera que actuar sobre el origen de los productos por motivos de seguridad, se ha constatado que los establecimientos conservaban dicha documentación comercial en todos los casos.
Si se desglosa el cumplimiento del etiquetado de los diferentes productos vendidos, más del 95 por ciento de los productos van etiquetados, si bien el responsable solamente figura en el 63 por ciento de los casos y su domicilio en la mitad de los mismos.
ADVERTENCIAS
Sobre la indicación de instrucciones o advertencias, el 86 por ciento de los productos controlados las incorporan, y el país de procedencia solamente está en seis de cada diez cigarrillos.
El marcado CE está en el 92 por ciento de los productos y la información en castellano se incorpora en el 77 por ciento de los productos.
En lo que respecta a garantías, se encuentra cierta confusión en el sector, ya que en el caso consumibles o productos cuya vida útil está acotada (cargadores, pilas, atomizadores, resistencias) hay que referirse a tiempos medios de uso, sin embargo en el resto de componentes, hay que considerar preceptiva la garantía por el plazo legal de dos años.
Solamente uno de cada tres establecimientos tiene clara esta diferenciación, y por tanto, no se induce a confusión en relación con el término de garantía.
PUBLICIDAD
En el apartado de la publicidad, se comprueba que prácticamente el 95 por ciento se ajusta a o realmente ofrecido, si bien existen referencias a efectos beneficiosos para la salud en el 6,5 por ciento de los establecimientos, con llamadas del tipo "Gana en salud", "para respirar, para vivir, por salud de los que te rodean", "Cigarrillos de vapor cuida de ti, cuida de la gente que te rodea", "La franquicia para la salud de las personas" o "Mejora la salud. En Inglaterra los médicos están empezando a recomendarlo".
Así, se trata de un sector absolutamente nuevo y con inminentes perspectivas de modificaciones normativas en cuanto a uso; no obstante, como un bien de consumo, independientemente de las posibles afecciones para la salud, deben reunir unos requisitos mínimos en cuanto a condiciones de venta, y es en ese apartado donde ha incidido la inspección de consumo.