El consumo moderado de cerveza dentro de la dieta mediterránea podría reducir mortalidad por enfermedad cardiovascular

ZARAGOZA 27 May. (EUROPA PRESS) -

El consumo moderado de cerveza en el marco de la dieta mediterránea podría reducir la mortalidad por enfermedad cardiovascular, según ha manifestado la médico internista del Hospital Clinic de Barcelona, con motivo de la presentación en Zaragoza del estudio 'Prevención con Dieta Mediterránea', en la II Jornada de Jóvenes Médicos de Atención Primaria de SEMERGEN celebrada en la capital aragonesa.

La facultativo ha explicado que este trabajo concluye que los efectos beneficiosos de la dieta mediterránea se consiguen a través de la mezcla de alimentos, por lo que es importante centrarse en patrones de alimentación y no en productos específicos, ha informado el Centro de Información Cerveza y Salud en una nota de prensa.

Precisamente, esta dieta incluye una alimentación variada en la que predomina el consumo de verduras, frutas, legumbres y hortalizas, así como cereales integrales, pescado, carnes blancas, frutos secos y aceite de oliva.

Asimismo, la inclusión en la dieta de un consumo moderado de bebidas fermentadas, como la cerveza, siempre en adultos sanos, favorece la disolución de las grasas en el organismo, así como la absorción de polifenoles, un tipo de antioxidantes presentes en las bebidas fermentadas y otros alimentos de origen vegetal.

Domènech ha hecho hincapié en la importancia del patrón de consumo de bebidas fermentadas, afirmando que para obtener efectos positivos para la salud "es necesario seguir un patrón de consumo regular y moderado, siempre acompañado de alimentos".

Por el contrario, un consumo irregular y excesivo de este tipo de bebidas "tendría efectos opuestos". Así, la doctora ha advertido de los riesgos de la ingesta abusiva de bebidas alcohólicas y ha puntualizado que, aunque el consumo semanal se mantenga en los límites del consumo moderado, si éste se realiza de forma localizada durante el fin de semana, los beneficios para la salud de las bebidas fermentadas desaparecen, aumentando el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares y otras enfermedades asociadas al consumo excesivo de alcohol.

CONSUMO MODERADO

Domènech ha señalado que el consumo moderado consiste en la ingesta de entre una y dos cañas al día en el caso de las mujeres --no más de 15 gramos de alcohol-- y entre dos y tres cañas para los hombres --no más de 30 gramos--.

Durante su ponencia, la doctora ha comentado que el estudio 'Bases científicas de los efectos beneficiosos del consumo moderado de cerveza en el sistema cardiovascular', publicado en revistas de prestigio internacional como Atherosclerosis y Nutrition Metabolism, concluye que el consumo moderado y regular de cerveza en las comidas principales podría ejercer un efecto protector en la aparición y progresión de la aterosclerosis, es decir, el endurecimiento de los vasos sanguíneos por la acumulación de grasa.

También sería positivo sobre diferentes factores de riesgo cardiovascular, especialmente en la población con riesgo vascular moderado-alto. Por otra parte, durante la realización del estudio, la composición corporal --peso, índice de masa corporal y relación cintura-cadera-- de los sujetos participantes no se vio afectada tras el consumo moderado de cerveza.

Domènech ha afirmado que "la cerveza es una bebida fermentada, elaborada a partir de ingredientes naturales que contiene vitaminas y minerales, además de ser fuente de compuestos bioactivos como los polifenoles" y el consumo de alimentos ricos en este tipo de compuestos "podría ayudar a disminuir enfermedades cardiovasculares, neurodegenerativas o diabetes".

La investigación también concluye que la presión arterial sistólica se vio reducida tras el consumo moderado de cerveza, especialmente en el caso de la cerveza sin alcohol. Además, otras variables aumentaron, como el HDL (colesterol bueno) y la concentración sanguínea de células progenitoras endoteliales, lo que implica un incremento de la capacidad de regeneración del endotelio.

"Cabe resaltar también que tras el consumo diario durante cuatro semanas de cerveza tradicional y sin alcohol, se halló isoxanthohumol en la orina de los participantes que habían consumido estas bebidas, pero no en las personas que habían ingerido bebida destilada", ha constatado la Domènech, que ha precisado que el xanthohumol y el isoxanthohumol son compuestos polifenólicos antioxidantes que reducen el estrés oxidativo, funcionan como antiinflamatorios y ayudan a la formación de nuevos vasos sanguíneos, así como a la cicatrización de heridas.

ESTUDIO PREDIMED

El estudio 'Prevención con Dieta Mediterránea' (PREDIMED) ha sido realizado en España entre 7.447 adultos con factores de riego vascular y ha medido el agregado de la mortalidad cardiovascular, infarto y accidente bascular cerebral.

Transcurridos cinco años, se percibe una diferencia de un 30 por ciento en la incidencia de enfermedades cardiovasculares entre el grupo de control, que seguía una dieta baja en grasas, y los dos grupos que seguían una dieta mediterránea suplementada con aceite de oliva y frutos secos, respectivamente.

En el marco de la investigación también se estudiaron los patrones de alimentación en España de los consumidores habituales y moderados de cerveza frente a los abstemios y se encontró que los primeros tenían una dieta más saludable, con una mayor ingesta de macronutrientes y micronutrientes.

Asimismo, el estudio evidenció que los consumidores moderados de cerveza hacen más ejercicio, por lo que podemos afirmar que tienen un estilo de vida y una alimentación más saludable que los abstemios.