El delegado del Gobierno respalda la actuación policial tras los últimos desórdenes públicos

Gustavo Alcalde.
EUROPA PRESS
Actualizado: martes, 28 enero 2014 17:13

ZARAGOZA 28 Ene. (EUROPA PRESS) -

El delegado del Gobierno de España en Aragón, Gustavo Alcalde, ha mostrado su respaldo a la actuación policial que ha tenido lugar en Zaragoza los días viernes y sábado, 17 y 18 de enero, y el sábado, 25, para precisar que "la presencia de policía en estos actos viene obligada por la detección de grupos muy violentos, como así se ha puesto de manifiesto".

En un comunicado, Alcalde ha afirmado que "desde el máximo respeto al derecho de manifestación y a aquellos ciudadanos que legítimamente expresan sus posiciones en la calle, hago patente mi repulsa y condena de aquellos otros que cometen acciones vandálicas".

En este sentido, ha lamentado "que algunas formaciones políticas y colectivos vecinales, lejos de condenar la violencia, la amparen, protejan e incluso auspicien con sus declaraciones y comportamientos".

Gustavo Alcalde ha recordado que la primera concentración del día 17 de enero se convocó en apoyo a los vecinos del barrio del Gamonal en Burgos, pero "los hechos han demostrado que esto ha sido una excusa para buscar, entre otros objetivos, agitar la calle".

El delegado ha añadido que "los actos vandálicos son la herramienta para conseguir la intervención policial y las consiguientes detenciones y así poder hablar de represión policial, estado de sitio, toque de queda y otras expresiones carentes de sentido en nuestro Estado de derecho".

En un comunicado de la Delegación del Gobierno en Aragón se añade que "la prudencia y proporción de la actuación policial en Zaragoza ha quedado de manifiesto una vez más" y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado "seguirán trabajando para proteger a todos los ciudadanos y sus bienes".

RELATO DE LOS HECHOS

El citado texto relata como el viernes, 17 de enero, se celebró una concentración en el Paraninfo de la Universidad de Zaragoza comunicada por el Frente Estudiantil y Social a la Delegación del Gobierno para apoyar a los vecinos del barrio del Gamonal en Burgos.

"La concentración agrupó a un número aproximado de 700 personas, sin que se produjera incidente alguno", si bien, "transcurridos unos minutos, en torno a las 20.30 horas, se inició una manifestación ilegal", que marchó por el paseo de la Independencia, plaza de España, Coso y calle Alfonso, con final frente a la Delegación del Gobierno.

"Si bien se trataba de una manifestación ilegal, los agentes del Cuerpo Nacional de Policía acompañaron a los manifestantes para evitar otro tipo de desórdenes hasta la Delegación del Gobierno sin producirse incidentes", han apuntado las mismas fuentes.

A partir de entonces, "varias decenas de personas se dirigieron hacia la zona del Casco Viejo de la ciudad, la Magdalena y calles adyacentes" y fue ahí, cuando, "a raíz de la rotura de las lunas de un supermercado, la policía se vio obligada a actuar para proteger a las personas y sus bienes".

Asimismo, "se continuaron produciendo actos vandálicos con rotura de semáforos, cabinas telefónicas, quema de contenedores y vehículos o el levantamiento de barricadas con sillas y mesas de cafeterías. Tras varios lanzamientos de piedras y botellas a los agentes de la autoridad por parte de los alborotadores, seis policías quedan contusionados y se detuvo a cuatro personas por desórdenes públicos".

MANIFESTACIÓN ILEGAL

La Delegación del Gobierno en Aragón precisa que, al día siguiente, sábado 18 de enero, "se convocó a través de las redes sociales una nueva manifestación, en este caso ilegal, en respuesta a la actuación de la policía del día anterior".

"Preventivamente, dados los altercados ocurridos, la policía impidió el acceso de los manifestantes al lugar, al no estar comunicada la manifestación y, además, por la presencia de material de construcción susceptible de ser utilizado como arma arrojadiza".

La Delegación agrega que se identificó a personas "que a toda costa pretendían realizar la concentración ilegal", se levantaron actas de infracción por desobediencia a los agentes de la autoridad, por tenencia de bolas de acero sin justificar y por tenencia de estupefacientes y fueron detenidas otras cuatro personas, dos de ellas menores de edad, "por resistencia y desobediencia grave".

El sábado, 25 de enero, fue convocada otra manifestación, debidamente comunicada por parte de la asociación de vecinos Lanuza-Casco Viejo, a la que se sumaron 20 colectivos, con el lema 'La calle es nuestra, basta de represión'.

Los participantes se concentraron a las 18.00 horas, "en torno a unas 800 personas", en el Paraninfo de la Universidad de Zaragoza. La manifestación se desarrolló por el Paseo de la Independencia, Plaza de España, Coso y calle Alfonso I hasta llegar, sobre las 20.00 horas, frente a la Delegación del Gobierno, donde los manifestantes, en torno a la mitad de los que iniciaron la concentración, permanecieron por espacio de unos 40 minutos sin que se produjeran incidentes, han sostenido desde la Delegación.

"A partir de entonces unas decenas de personas comenzaron a provocar desórdenes públicos por las calles Don Jaime I, Mayor, San Jorge, Verónica y San Miguel, donde se produce incluso la agresión a un agente de la Policía Local con un objeto contundente, un cenicero de cristal, que impactó en su cabeza provocándole una herida que precisa asistencia médica 'in situ' y, posteriormente, su traslado al Hospital MAZ de Zaragoza".

"La identificación inmediata del agresor por funcionarios policiales, permitió su rápida detención y traslado a dependencias de la Policía" y, después, se detuvo a otras tres personas "que habían participado en esos mismos desórdenes públicos y otra más por la quema de dos contenedores".

Asimismo, "se intervino material para provocar incendios, botes de pintura de color rojo y prendas de vestir para cambiar de aspecto y no ser reconocidos".