ZARAGOZA 20 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Diputación de Zaragoza ha sacado a concurso por 315.000 euros la obras restauración de la capilla de Santiago de la catedral de Tarazona. Las obras se iniciarán este año, tienen un plazo de ejecución de 9 meses y consistirán en la rehabilitación integral de este espacio.
Además, posteriormente también se acometerá la recuperación del retablo de Santiago Apóstol, que se desmontó en los años ochenta y podrá volver a su emplazamiento original. Ambas actuaciones serán financiadas en su totalidad por la Diputación de Zaragoza como ya hizo con la capilla y el retablo de la Purificación, otro magnífico espacio de la seo turiasonense que fue restaurado por la DPZ entre los años 2019 y 2023 gracias a una inversión de otros 290.000 euros.
El diputado provincial por el partido judicial de Tarazona, Eduardo Arilla, explica que "el compromiso de la Diputación de Zaragoza con la conservación y mantenimiento de nuestro patrimonio es firme y se constata con el respaldo económico que se da, en este caso, a la recuperación de estas dos capillas de la catedral de Tarazona para que puedan contemplarlas y utilizarlas tanto los vecinos y vecinas como los miles de turistas que la visitan cada año. En total la DPZ va a invertir más de 600.000 euros en la seo turiasonense".
Tras haber actuado en la capilla y retablo de La Purificación, la intervención que se plantea en estas nuevas obras se centra en la conservación y valoración de los sistemas decorativos de la capilla y para ello se actuará sobre sus soportes materiales, todo ello en coherencia con el Plan Director de actuación en esta catedral, sin olvidar el conjunto de la capilla.
LA RESTAURACIÓN
Las empresas interesadas tienen de plazo hasta el 24 de septiembre para presentar sus ofertas. Los trabajos previstos en la memoria de la licitación inciden en las pinturas murales, yeserías, azulejos y las claves pinjantes que ornamentan la bóveda.
Las obras afectarán al interior de la capilla de Santiago Apostol, se contempla el acceso a las mismas a través de un paso protegido entre la puerta de San Antón, a la largo de la nave del Evangelio. Se aprovechará la obra para hacer una intervención arqueológica de los restos hasta una profundidad promedio de 1,80 metros y se limpiarán y consolidarán las piezas halladas para su siglado, catalogación y conservación en el lugar que se determine.
La intervención incluye también obras de saneamiento y nuevas soleras y con los andamios y plataformas previstas se realizará el trabajo de los restauradores que comenzará por el desmontaje y restauración de las cinco claves pinjantes que penden de la bóveda. También se actuará en el cosido de las grietas de los muros y se contempla la instalación de luminarias.
La fase de la intervención prevé además la reposición del pavimento y el cerramiento del óculo. Una vez finalice esta actuación, el convenio entre DPZ y Obispado contempla también otras obras para restaurar el retablo de Santiago Apóstol, que permanece almacenado desde los años ochenta y que volverá a montarse en la capilla.
LA CAPILLA Y EL RETABLO
La capilla de Santiago de la catedral de Tarazona es un conjunto de estilo gótico hispanoflamenco de la última década del siglo XV y está situada justo al lado de la de La Purificación.
Abre al segundo tramo de la nave lateral norte del templo con ingreso en arco apuntado decorado con cardinas. Es de planta cuadrada cubierta con bóveda de crucería estrellada y claves de tracería gótica. En las cuatro esquinas, los nervios descansan en grandes ménsulas con imágenes de los cuatro evangelistas talladas en yeso.
También forma parte de esta capilla el retablo de Santiago apóstol, que se finalizó en 1497 y que está embalado y almacenado desde que se desmontó en la década de los ochenta.
El retablo es mixto, de escultura y pintura al óleo sobre tabla. Ocupa la casa central del banco un sagrario poligonal que sirve de basamento a la escultura titular del apóstol Santiago, sobre la que hay un doselete. Completan el conjunto escultórico del retablo las catorce figuras del guardapolvo, que incluyen un apostolado y un Calvario. Las pinturas al óleo sobre tabla están atribuidas a Pedro Díaz de Oviedo, asimismo alineado con la corriente estilística hispanoflamenca.