ZARAGOZA 15 Sep. (EUROPA PRESS) -
CaixaForum Zaragoza acoge desde este miércoles, 15 de septiembre, y hasta el 9 de enero la exposición 'Faraón. Rey de Egipto', una muestra que ilustra 3.000 años de historia y que reúne 137 piezas destacadas de la colección del Museo Británico.
El director de CaixaForum Zaragoza, Ricardo Alfós, y la comisaria del Departamento de Egipto y Sudán del Museo Británico, Marie Vandenbeusch, --que ha participado vía streaming--, han inaugurado este miércoles la muestra.
Alfós ha señalado que el Museo Británico "conserva uno de los fondos más importantes del mundo" de esta cultura y "es el que ofrece una imagen global más completa del antiguo Egipto".
El director de CaixaForum Zaragoza ha detallado que se trata de una selección de esculturas, relieves en piedra, joyas, papiros y objetos rituales que ayudan a comprender la figura del faraón en aquella época.
Entre los objetos que se exponen, Alfós ha destacado la figura del dios halcón Re-Haractes, una cabeza "impresionante" del faraón Tutmosis III, de limolita verde, unas losetas del palacio de Ramsés III o un busto de mármol de Alejandro Magno, que fue uno de los monarcas de Egipto nacido fuera del país, ya que, como ha puntualizado el director de CaixaForum Zaragoza, "ni todos los gobernantes fueron egipcios, ni todos fueron hombres, también hubo mujeres", algunas de las cuales aparecen en esta exposición.
La responsable del Museo Británico, que es también comisaria jefe de la exposición de 'Faraón. Rey de Egipto', Marie Vandenbeusch, ha manifestado que la muestra sigue "una línea expositiva temática y no cronológica", en la que se recorren todos los elementos que formaban la figura del monarca, a través de la imagen que él mismo quería transmitir.
GUERRERO Y SER DIVINO
La muestra se divide en nueve apartados, en los que se analiza la figura del monarca egipcio desde todos los puntos de vista: como ser divino, situado en el centro de la estructura social, a cuyo alrededor se articulan símbolos y creencias que van más allá de la existencia terrenal; en su vida de palacio, rodeado por su familia; como gobernante y como guerrero.
Vandenbeusch ha recordado que la exposición se organizó en 2011 y, tras verse en Reino Unido, llegó a España donde ha recorrido varias ciudades. Su discurso expositivo, sin embargo, se ha ido renovando durante este periplo y se han ido cambiando algunas piezas, ha ratificado.
'Faraón. Rey de Egipto', ha dicho Vandenbeusch, ofrece "obras de arte y estatuas monumentales, mezcladas con otros objetos con diferentes funciones, que no se pueden ver normalmente", como las incrustaciones de colores que se usaron para decorar el palacio de un faraón; las misivas diplomáticas grabadas en escritura cuneiforme sobre tablillas de arcilla; o las imágenes de gobernantes nubios, griegos y romanos que actuaron como faraones.
La muestra explora "el simbolismo, el ideario y las creencias del antiguo Egipto", en el que los faraones basaban su legitimidad en un supuesto origen divino, ha enfatizado Vandenbeusch.
Esa conexión con los dioses "les aseguraba la protección en su puesto", y puede verse en piezas como un cartucho del rey Ramsés II o una estatuilla de oro y plata del dios Amón-Re del templo de Karnak de Tebas, ha referido la comisaria.
Como sumos sacerdotes, los faraones supervisaron la construcción de grandiosos templos para la celebración de rituales. Como testimonio de ello, Vandenbeusch ha mencionado una estatuilla de Tutmosis IV, en posición oferente.
LÍDER MILITAR
Junto a esta naturaleza divina, el rey también era a menudo representado como un audaz guerrero o un genio de la estrategia militar, si bien Egipto "también sufrió numerosas derrotas", ha reconocido la comisaria. Sin embargo, a través de las estatuas que los representaban y los monumentos, "los faraones construían con cuidado sus identidades, y proyectaban una imagen idealizada de sí mismos".
Para eso, cada monarca se definía mediante la adopción de símbolos reales. Así, por ejemplo, inscribían sus nombres en cartuchos, o llevaban en la frente el ureo, una figura de cobra erguida, de las que puede verse alguna en la exposición.
También la vida de palacio tiene su espacio en esta muestra. En este ámbito la comisaria ha llamado la atención sobre una pequeña placa dorada de Amenenhat IV encontrada lejos de Egipto y sobe la que Vandenbeusch ha aventurado "quizá formaría parte de una caja de incienso".
Asimismo, el visitante se puede acercar al papel de los ayudantes y oficiales que acompañaban a los faraones en las labores de gobierno, que queda ejemplificado en el anillo de Sheshong, con el que el alto funcionario pondría el sello a los documentos oficiales, o la estatua de un ayudante de la corte de Senenmut con la princesa Neferure.
Además, la exposición muestra el rostro de los faraones, que impresionan por su seriedad, y sobre la que Vandenbeusch ha resaltado el alto nivel de calidad de los artistas que las realizaron.
Los faraones también trabajaban durante toda su existencia en su paso al más allá tras la muerte, cuyo tránsito se aseguraban a través de "la momificación y los sarcófagos", ha apuntado la comisaria, subrayando que en la muestra puede verse un fragmento de un sarcófago de Ramnsés IV, así como diversos shabtis, o figuras funerarias.
TRES AUDIOVISUALES
Ricardo Alfós ha manifestado de que, acompañando a las obras, la muestra incluye tres piezas audiovisuales: dos vídeos y un interactivo. En el primero de los vídeos se nos presenta la geografía de la antigua civilización egipcia, mientras que en el segundo se profundiza sobre la evolución de las tumbas reales en el antiguo Egipto.
Por su parte, el interactivo, denominado 'Lista de reyes', representa una piedra tallada egipcia --con una longitud real de 5 metros--, con incisiones e incompleta.
Además, el director de Caixaforum Zaragoza ha recordado que han vuelto las visitas guiadas y ha anunciado el ciclo de conferencias 'Historias del Nilo', a cargo del egiptólogo David Rull, del 7 al 28 de octubre. En este marco, también tendrán lugar visitas familiares y una conferencia pensada para toda la familia, con la arqueóloga Núria Roselló.
Finalmente, la exposición se completa con la edición de una publicación a cargo de la Caixa y el Museo Británico, y coordinada por la comisaria, Marie Vandenbeusch.