El jefe de la Obra Social de Ibercaja destaca que Goya tiene una visión del toro "más trágica" y Picasso "más estilizada y con menos tensión"
ZARAGOZA, 20 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Museo Goya Colección Ibercaja-Museo Camón Aznar de Zaragoza inaugura esta tarde, a las 20.00 horas, la exposición 'La Tauromaquia: Pasión e innovación. Francisco de Goya y Pablo Picasso', con obras del pintor malagueño en las que se comprueba la influencia que el artista aragonés tuvo en Picasso y que enfrentan la serie de grabados de la 'Tauromaquia' de Goya con la realizada dos siglos después por el creador andaluz.
Organizada por la Obra Social de la Fundación Ibercaja, la exposición se podrá visitar hasta el 29 de octubre y permite comparar los grabados de Picassso con los originales de Goya que se exhiben de forma permanente en este museo.
Situada en la sala de exposiciones temporales del Museo Goya, la muestra se compone de 26 aguatintas al azúcar grabadas sobre cobre realizadas por Picasso para ilustrar el libro 'La Tauromaquia o arte de torear de Pepe Illo' y la portada realizada en la técnica de la punta seca; dos estampas adicionales con el tema del picador y diez fotografías tomadas por el fotógrafo americano David Douglas Duncan, durante el proceso de creación de 'La Tauromaquia' de Picasso.
El jefe de la Obra Social de Ibercaja, Juan Carlos Sánchez, la coordinadora general de la exposición y responsable del programa de Educación y Cultura de la Obra Social de la entidad, Magdalena Lasala, la directora del Museo Goya, Rosario Añaños, y los comisarios de la muestra, Lola Durán y Rafael Inglada, han presentado 'La Tauromaquía', la segunda de las cuatro muestras que revisan las cuatro series de grabados Goya y su influencia en artistas contemporáneos, que se inició con las estampas de Dalí y continuará con los trabajos de los Hermanos Chapman y Víctor Mira.
Lola Durán ha destacado que Picasso y Goya son los dos artistas "que mejor conocen y reflejan el mundo del toro", Goya con los grabados que creó entre 1814 y 1816 y el creador malagueño con esta serie que realizó en los años 50 del siglo pasado.
La comisaria ha explicado que el pintor de Fuendetodos trabajó en su 'Tauromaquia' con casi 70 años y después de realizar los 'Caprichos', que "tantos problemas le dieron con la Inquisición" debido a su satírica forma de retratar a la sociedad de la época.
Además, se encontraba también creando la serie de los 'Desastres de la Guerra' y en un momento en el que solo vendían "los santos y los toros", Goya apostó por esta serie para intentar vender su obra y "recuperarse" tras los 'Caprichos'.
VISIÓN HISTÓRICA
El pintor aragonés muestra una visión histórica de la tauromaquia en España desde la antigüedad, con escenas de "violencia y muerte" en las que da cuenta de las dos escuelas de toreo que dominaban el panorama en la época, la navarro-aragonesa, con el Estudiante de Falces, Juanito Apiñani y Martincho, y la andaluza, con Pepe Illo y Pedro Romero. También representó las diferentes suertes del toreo.
Inicialmente, grabó 33 estampas, aunque siete cobres fueron trabajados en el anverso y reverso, composiciones desechadas por el artista y que no forman parte de la primera y segunda edición, pero que se incorporaron a las sucesivas.
Goya también fijó su atención en Pepe Illo, al que dedicó dos estampas, 'Pepe Illo haciendo el recorte del toro' y 'La desgraciada muerte de Pepe Illo', que también protagoniza otras tres de las estampas inicialmente descartadas.
GOYA COMO REFERENCIA
Rafael Inglada, experto en Picasso y lleva 28 años investigando su obra, ha detallado que desde muy niño el artista fue aficionado a las corridas de toros, a las que asistía con su padre José Ruiz Blasco, tanto en Málaga como en La Coruña. También desde su infancia pudo conocer el trabajo de los grandes maestros, como Velázquez y Goya, que marcarían su obra.
"Hay mucho del Picasso grabador tomado de las técnicas de Goya", ha asegurado el especialista, al detallar que el pintor malagueño visitó Zaragoza en dos ocasiones, en 1917 y en agosto de 1934, "cuando vino por última vez a España" tras marcharse a vivir a Francia. Incluso en su obra como escritor, Goya siguió siendo una referencia años después para Picasso, ha apuntado.
En 1928, Gustavo Gili y Roig pidió a Picasso que realizase las planchas para una edición bibliofilia de 'La Tauromaquia o arte de torear de Pepe Hillo', realizando siete aguafuertes. En 1957, retomó este trabajo realizando en los sótanos de su villa 'La Californie' la punta seca y las 26 aguatintas sobre cobre que ilustran el libro 'La Tauromaquia' (La Cometa. Gustavo Gili), publicado en 1959 en Barcelona.
En su tauromaquia, Picasso ofrece "una sucesión, como los fotogramas de una película" en los que no solo demuestra su interés por el toro y el torero, sino por todo lo que ocurre en el ruedo. Aunque se inspira en las corridas de toros a las que asiste durante esos años en localidades francesas, con esta obra "vuelve a su país de origen, a la España de su infancia, de su juventud", de forma que "regresa a sus orígenes, a su gusto por lo clásico", rindiendo un homenaje a "la España perdida", ha apuntado Inglada.
PASIÓN POR EL TORO
Por su parte, el jefe de la Obra Social de Ibercaja, Juan Carlos Sánchez, ha resaltado que el objetivo de la entidad es difundir la obra de Goya y reforzar su vínculo con Ibercaja, con Zaragoza y con Aragón, a través de actividades como esta muestra, con exposiciones itinerantes a otras ciudades, como Logroño, e incorporando nuevas obras a la colección, como la cesión temporal del retrato del monarca Carlos IV, que permite tener en una misma sala "siete cuadros de retratos que explican su evolución como retratista durante 40 años".
Sánchez ha estimado que "si Goya y Picasso hubieran sido contemporáneos hubieran hablado mucho de toros y esta exposición salva la distancia en el tiempo" y permite que las obras de ambos genios dialoguen "y muestren su particular visión del mundo del toro".
Mientras que las estampas de Goya eran más "trágicas y dramáticas", la tauromaquia de Picasso destaca por su "visión estilizada, menos dramática, con menos tensión", si bien ambos retratan su pasión "por la danza del toro".
"TRES FUERZAS DE LA NATURALEZA"
La responsable del programa de Educación y Cultura de la Obra Social de Ibercaja, Magdalena Lasala, ha asegurado que esta exposición "es una de las más especiales de los últimos tiempos porque se ponen frente a frente dos monstruos" del arte y une a "tres fuerzas de la naturaleza: Goya, Picasso y el toro".
La muestra, que cuenta con la colaboración del Museo Picasso de Barcelona, la Fundación Picasso-Museo Casa Natal de Málaga, la Galería Antonio de Suñer de Madrid y el archivo fotográfico de Edward Quinn, se acompaña de actividades didácticas, talleres y visitas guiadas para todos los públicos.
Entre los actos programados se encuentran acciones escolares de Primaria y Secundaria; recorridos guiados que se iniciarán este viernes con un precio de 3 euros por persona; el taller 'Jugar con los recuerdos de Picasso en los grabados de Goya', para niños a partir de los 6 años; y los programas 'Goya y Picasso, dos amigos dibujando arte' y 'Descubrimos a Picasso a través de Francisco de Goya', también para escolares y alumnos de Bachillerato y ciclos formativos.