GURREA DE GÁLLEGO (HUESCA), 9 (EUROPA PRESS)
Nacida de la inquietud de un grupo de vecinos por el medioambiente y el amor a su tierra, la asociación Entorno de Vida trabaja desde hace poco más de seis meses por "reverdecer" los alrededores de Gurrea de Gállego (Huesca) con el objetivo de dejar como legado un paisaje más amable para las futuras generaciones.
La iniciativa, que ya cuenta con más de un centenar de socios y está abierta a cualquiera que desee unirse, surgió con la fuerza de un torrente voluntarista de buenas ideas amontonadas en conversaciones de bar y poco a poco la realidad ha ido matizando entusiasmos y acotando manos dispuestas para sumar finalmente un buen número de acciones entre jornadas de plantaciones, salidas a limpiar y adecentar caminos, talleres medioambientales para escolares, construcción de casetas para pájaros y hoteles de insectos, presentaciones, viajes para regar y horas echadas sin remilgos en un huerto comunal.
Lo explica a Europa Press uno de sus principales promotores, Carlos Laplaza, convencido ambientalista que ha encontrado la complicidad de un grupo de vecinos coetáneos con los que comparte aficiones e inquietudes sobre la naturaleza.
"Ninguno de nosotros somos expertos, vamos aprendiendo sobre la marcha y a base de contactar con otras asociaciones, de leer libros, de ver documentales y de hablar entre nosotros surgen las propuestas", reconoce.
El motor que los mueve, según reconoce "es la ilusión", la que alimenta el amor por su pueblo, su pasión por disfrutar de la naturaleza y el compromiso por aportar parte de su tiempo a mejorar el paisaje que los rodea.
"Aquí en el pueblo hay mucha tierra, mucha huerta y soto y nuestra idea es poner bosques comestibles". Se refiere Laplaza a una plantación que imita la estructura de un bosque natural para aportar comida y otras materias primas, potenciar la biodiversidad y convertirse en un sumidero de carbono. La idea bebe de la permacultura y esa filosofía de vida sostenible que apuesta por imitar el funcionamiento de los ecosistemas naturales.
RUTA DE LOS CUATRO AZUDES, TALLERES Y PLANTACIONES
Metidos en harina, repartieron tareas en varios grupos de whatsApp -grupo de rutas y senderos, de flora y fauna, de sensibilización y talleres-, encontraron la complicidad del Ayuntamiento y de la cooperativa agropecuaria La Sarda y centraron sus esfuerzos en hacer una ruta circular, la ruta de los cuatro azudes que aprovecha el privilegio de contar en sus tierras con los ríos Gállego y Sotón.
"Se trata de una una vía verde muy bonita alrededor del pueblo que hemos ido desbrozando y limpiando, en la que vamos instalando hoteles de insectos, mejoramos los accesos, señalizamos el camino y advertimos de los puntos peligrosos", explica este vecino de Gurrea.
Entorno de Vida tiene su camino marcado y éste pasa por "reverdecer" el paisaje, según remarca el portavoz de Entorno de Vida: "Gurrea de Gállego, para el terreno tan grande que tiene y su número de habitantes --1.430 vecinos en 2023 según el INE-- debería contar con más árboles.
El Ayuntamiento ha ido plantando en los últimos años y el resultado se verá en 15-20 años. Y nuestra idea es esa, reverdecer Gurrea. Esa sería nuestra ilusión, tener más espacios verdes, que estuvieran limpios, por supuesto, tener sitios para andar bajo la sombra, sobre todo en verano, porque aquí los veranos son muy secos y calurosos", expone.
La página web de Entorno de Vida 'entornodevida.org' mantiene un contador en su parte superior derecha con el número de árboles plantados por la asociación, ahora mismo en 255, entre carrascas, encinas y pinos en un proceso de aprendizaje de "ensayo-error" a veces "desalentador".
"Empezamos acudiendo al vivero de aquí y plantando en laderas directamente y leímos que si llegas a un 10% de los ejemplares que sobreviven, que está muy bien", recuerda.
TAMBIÉN CULTIVAN LA CONCIENCIA MEDIOAMBIENTAL
Tras comprobar con pesar el efecto de los rigores del verano y que cultivarlos en maceta atrofia las raíces, optaron por plantar directamente la semilla y ahora se esmeran en desplegar un sistema de riego por goteo.
"Lo principal es que no falte la ilusión. Y eso nos sobra", asegura Laplaza. La misma ilusión que tratan de contagiar a los escolares del CRA Violada Monegros, que agrupa a los estudiantes de Gurrea de Gállego, El Temple y Tardienta, con charlas medioambientales y talleres.
"Aquí las profesoras son todas jóvenes y están muy dispuestas a que vayamos a hacer actividades como un taller de hotel de insectos, hicimos también un vallado de madera para poner un huerto de flores aromáticas, una escuela-taller de cajas-nido y también un taller de reciclaje con cartones de huevos y tapones que sirvió para hacer manualidades y enseñarles lo útil que puede ser reciclar", enumera.
Actividades con las que confían en despertar una conciencia y un espíritu activo que echan en falta en la gente de 20 y 30 años a los que reconoce "cuesta mucho movilizar".
"A las plantaciones viene mucha más gente de 45-50 años y más que de 40 para abajo. Y la verdad es que me esperaba algo más de respuesta entre la gente joven. Ahí me he llevado un poco de desilusión, pero me dicen en otras asociaciones que es general, que cuesta mucho conseguir que se animen", lamenta.
Entorno de Vida cuenta también con un pequeño vivero en un terreno cedido por el Ayuntamiento en el que hacen su propia mezcla de tierras y cultivan las semillas que recogen en las andadas y salidas a limpiar que organizan.
Además, también tienen su propio logo que plasman en camisetas y bolsas de tela ecológica a la venta, hacen exposiciones, han cursado una visita al CITA para empaparse de conocimientos y se reúnen con numerosas asociaciones en busca de consejo e intercambio de experiencias.
"Con ilusión vamos haciendo cosas, menos de las que nos gustaría, pero poco a poco esperamos ir convenciendo a más gente y pegarles algo de nuestra pasión por cuidar de nuestro entorno porque al final todo tiene su recompensa", concluye Laplaza.