LETUX (ZARAGOZA), 31 (EUROPA PRESS)
Los vecinos de la localidad zaragozana de Letux, en el Campo de Belchite, están esperando a que deje de llover para poder empezar a valorar los daños y a trabajar en la reparación de las infraestructuras afectadas por las inundaciones causadas por el desbordamiento del río Aguasvivas, las peores en 80 años.
El alcalde de Letux, Miguel Sanz, ha indicado a Europa Press que la situación está "controlada" ya que el nivel del río ha bajado y está "casi dentro del cauce" de nuevo. Sin embargo, ha apuntado que sigue lloviendo "y con alegría", por lo que todavía no pueden acceder a algunas zonas.
El pico máximo de la crecida se produjo este miércoles, en torno a las 15.00 horas, si bien la situación ya se veía venir dada la situación en localidades como Villar de los Navarros, Herrera de los Navarros o Azuara. Sanz ha explicado que todo el agua procedente de esta zona --del río Herrera y el río Cámaras-- confluye con el río Aguasvivas, que también bajaba con un gran caudal, justo en Letux. "Todo el agua termina en Letux. Inunda Azuara y continúa a Letux", ha agregado.
Este es "el punto donde se juntan todas las aguas", ha señalado el alcalde, quien ha añadido que el embalse de Moneva, varios kilómetros más arriba de Letux, ha sujetado parte de la avenida, pero no lo suficiente. Un río Aguasvivas que bajaba crecido principalmente por la lluvia caída aguas arriba, en la provincia de Teruel, ya que las cantidades registradas en la zona se han situado entre los 35 litros en Letux o los 40 en Herrera, ha indicado.
El resultado es que las huertas de la zona han quedado completamente anegadas, con los cultivos "impracticables" y los caminos "inservibles", ha asegurado el alcalde, quien ha dicho que, no obstante, "hay que esperar" a que termine de llover. "Ya parará", ha resumido el sentir de los vecinos del pueblo. El agua ha entrado también en alguna vivienda de la zona baja de la localidad.
Por lo menos, a lo largo de la mañana de este jueves sí que han podido acometer las labores de limpieza y "las calles ya están limpias", con ayuda de la lluvia, que ha facilitado la retirada del barro.
Sin embargo, para valorar los daños en caminos o acequias, hay que esperar a que remita el temporal, ha finalizado Sanz, quien ha dicho que pedirá a la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ) que "eche una mano" en la reparación de las infraestructuras.