NUÉVALOS (ZARAGOZA), 9 Nov. (EUROPA PRESS) -
Francisco Remacha y Francisco Lafuente han encontrado una salida laboral y una manera de quedarse a vivir en el pueblo con la apertura de una carnicería en Nuévalos (Zaragoza), un pequeño negocio que ha sido muy bien recibido por los vecinos. "Lo hemos hecho para no tener que salir de nuestro entorno, además hacía décadas que no había carnicería en esta localidad", han indicado.
Esta carnicería-charcutería lleva un nombre simpático: 'Los Pacos'. Los dos son primos hermanos, estaban en el paro y lo que más deseaban era no tener que salir de su comarca para trabajar. "Teníamos que buscar una solución, pensamos que lo mejor era poner un negocio y así no tener que irnos de aquí, ese era el objetivo", ha comentado Francisco Lafuente, de 48 años. "Yo vivo en Nuévalos y mi primo en Ibdes", municipios que apenas distan entre si nueve kilómetros.
Se plantearon que lo más viable era emprender, tirar hacia adelante con un negocio y, qué mejor que una carnicería para aprovechar la gran experiencia que Francisco Remacha, de 56 años, tiene en el sector. "Empecé a los 14 años a trabajar en una carnicería, así que toda mi vida he sido carnicero, el último trabajo que tuve fue en una sala de despiece en Teruel".
Lafuente ha afirmado que les ha costado un esfuerzo enorme ver el proyecto hecho realidad. "Yo he capitalizado el paro, hemos tenido ayuda de las familias, todo lo hemos hecho nosotros, incluso las obras del local". También ha destacado que el agente de Desarrollo Local de la Comarca de Calatayud les fue guiando los pasos a seguir. "Debería ser mucho más sencillo abrir un negocio, existen demasiados trámites".
El pasado 20 de septiembre, por fin pudieron inaugurar el establecimiento. "Creemos que hemos acertado, además damos un servicio al pueblo del que antes carecía y, sobre todo, las personas mayores tienen ya a mano un sitio donde hacer la compra, sin necesidad de bajar a Calatayud", han subrayado.
Pero no solo acude a comprar la gente de Nuévalos, "se ha corrido la voz", vienen de los pueblos de alrededor y también turistas que se acercan a esta localidad de 350 habitantes que acoge el Monasterio de Piedra.
"En Ibdes me dicen que podíamos haber puesto allí la carnicería y, de hecho, supone un porcentaje elevado de nuestros clientes", ha comentado Remacha. "Turistas que vienen de paso, los que se alojan en las casas rurales", que han proliferado en los últimos meses, e "incluso restaurantes de la zona nos hacen ya pedidos".
"Lo primero que vendimos nada más abrir fue un jamón de cabra; lo segundo un jamón de Teruel, que deshuesamos y envasamos al vacío para un cliente de Ibdes que se lo iba a llevar a su hija que vive en Bali", ha referido Francisco Lafuente.
BUEN SERVICIO Y CALIDAD
Los Pacos han asegurado que su propósito es dar un buen servicio y ofrecer productos de calidad. "Lo importante es que los clientes salgan contentos de la tienda y, por eso despachamos buen género, el mejor que podemos traer". La carne de vacuno procede del Pirineo, el cordero es de Zaragoza y la carne de cerdo, al igual que los jamones curados, de la provincia de Teruel.
Asimismo, elaboran embutidos artesanos --morcillas, longanizas y chorizos-- siguiendo las recetas de sus abuelas, y "tienen una excelente aceptación".
También venden otros productos de la Comarca de Calatayud, entre los que se encuentran vinos de Denominación de Origen, mermeladas y aceite. No se han olvidado de incluir en el establecimiento productos congelados para que la cesta de la compra quede más completa.
La tienda está abierta los fines de semana. "Una carnicería lleva muchísimo trabajo todos los días, hay que preparar el género, además de despachar, aunque estamos contentos, vamos poco a poco".
Remacha y Lafuente han coincidido en resaltar que aún existen posibilidades para ganarse la vida en el medio rural y que se deben aprovechar las oportunidades para que los pueblos no sufran el abandono. "Nada es fácil, hay que trabajar duro, aunque nosotros esperamos que el negocio dé sus frutos y sea nuestro futuro", han dicho ilusionados.