Son los dos únicos ejemplares de linces que se pueden ver en Aragón
TRAMACASTILLA (TERUEL), 11 (EUROPA PRESS)
Esparto y Fernandina, una pareja de linces ibéricos, ya tienen un nuevo hogar en el Parque de Fauna La Maleza, situado en el municipio de Tramacastilla, en la comarca turolense de la Sierra de Albarracín, donde habitarán un amplio recinto.
El objetivo de la introducción de estos ejemplares de esta especie, que estuvo décadas en peligro de extinción, es acercar el lince ibérico a los visitantes y desarrollar acciones formativas centradas en la conservación y mejora de la biodiversidad.
Los linces, que ya pueden verse en La Maleza, formaban parte como reproductores del programa de cría en cautividad que se está llevando a cabo en España y proceden del centro El Acebuche de Doñana --el macho-- y de La Olivilla (Jaén) --la hembra--. Además, los felinos están en un momento "fantástico" porque esta primavera aún tuvieron cachorros.
La llegada de esta pareja de linces ibéricos al Parque de Fauna La Maleza se produjo hace dos meses y ha sido posible gracias a la colaboración del Departamento de Medio Ambiente y Turismo del Gobierno de Aragón.
UNA ACLIMATACIÓN COMPLICADA
El director del Parque, Ricardo Almazán, ha explicado a Europa Press que los animales estuvieron dos meses ocultos, fuera de exhibición, para su aclimatación.
Para ello, habilitaron dos cubículos independientes, donde podían verse pero no tocarse, dado que los linces son animales solitarios y "no son fáciles de convivir". De hecho, no fue hasta un mes después cuando comenzaron a juntarse "a ratos" y es ahora cuando pueden verse en La Maleza.
El lince ibérico es un animal carnívoro que se alimenta en un 90% de conejos y no habitaba ningún ejemplar en Aragón desde hace "60 ó 70 años tranquilamente", ha asegurado Almazán.
Para el director del Parque, su presencia permitirá que los visitantes puedan ver de cerca esta especie y también que Esparto y Fernandina disfruten de un espacio natural adecuado para su bienestar.
PARQUE DE FAUNA LA MALEZA
La Maleza es un parque de fauna de más de 23 hectáreas de terreno, donde se ha minimizado el impacto de las instalaciones respetando al máximo el entorno natural.
Ubicado en un paraje de rodeno, en el Barranco La Maleza, dispone de amplios recintos donde se recrean los hábitats adecuados para cada especie a lo largo del año, con el suficiente espacio y refugios naturales para su bienestar.
Por ello, el visitante debe ser paciente y disfrutar del momento en el que el animal decide salir, como un auténtico naturalista. Todos sus animales han nacido en cautividad, provienen de centros de recuperación o han sido rescatados de situaciones precarias.
Esparto y Fernandina serán los protagonistas de actividades de formación y sensibilización sobre la recuperación de la especie, que buscarán subrayar la importancia de la restauración de la biodiversidad en su conjunto, y del papel de los predadores en el equilibrio natural.
REINTRODUCCIÓN DEL LINCE EN ARAGÓN
También se espera que su presencia, mediante estas acciones de sensibilización, contribuya a la difusión del plan de reintroducción del lince en el que actualmente está trabajando el Gobierno de Aragón.
El lince ibérico, considerado hasta hace poco una de las especies más amenazadas del mundo, está viendo cómo su población se recupera gracias a esfuerzos de conservación en comunidades autónomas como Andalucía, Extremadura, Castilla-La Mancha o Murcia. Actualmente se plantean nuevos proyectos de reintroducción en otras comunidades como Castilla-León, Cataluña o Madrid.
En Aragón, se espera que la presencia de Esparto y Fernandina en el Parque Faunístico de La Maleza contribuya a la difusión del plan de reintroducción del lince en el que trabaja el Departamento de Medio Ambiente y Turismo, y que se enmarca dentro de la 'Estrategia para la conservación del lince ibérico en España y Portugal', cuyo objetivo es crear nuevas poblaciones de esta especie en zonas que ofrezcan las condiciones idóneas para su supervivencia.
Así, gracias a Esparto y Fernandina, en La Maleza explicarán a los visitantes cuáles son las ventajas de reintroducir esta especie en Aragón, que son muchas, y cuáles son los problemas, que son "muy pocos", según el director del Parque.
Entre los beneficios de la vuelta del lince a Aragón ha destacado el papel que tendrían para acabar con la plaga de conejos que sufren muchas zonas de la Comunidad, que está generando importantes daños a los agricultores, además de que, en general, los depredadores son "fundamentales" para los ecosistemas.
En cambio, los problemas son mínimos, como posibles ataques a corderos, que en Andalucía sólo han obligado a la Junta a abonar 1.200 euros al año en indemnizaciones a ganaderos, una cifra "ridícula". Además, el lince ibérico es un animal solitario y asustadizo que no causa problemas a los humanos, ya que huye de ellos "sin excepción".