ZARAGOZA 20 Dic. (EUROPA PRESS) -
El concejal socialista en el Ayuntamiento de Zaragoza, Horacio Royo, ha alertado de la "grave" situación de la depuradora de La Cartuja al requerir una inversión de entre 90 y 170 millones de euros, en el escenario más optimista.
El socialista pedirá una comparecencia del consejero municipal de Urbanismo en la próxima Comisión de Urbanismo, que también es vicepresidente de Ecociudad, para saber los planes del Gobierno de Natalia Chueca en materia de saneamiento.
En rueda de prensa ha explicado que el pasado 5 de noviembre quedó aprobada la Directiva Europea de Tratamiento de Aguas Residuales Urbanas que eleva las exigencias de depuración de aguas "a unos niveles que la actual planta de La Cartuja no cumple si no es mediante unas elevadas inversiones".
Royo ha comentado que han sido los propios técnicos de Ecociudad los que, por primera vez, han puesto cifras a esas inversiones que en el escenario más optimista, alcanzarían los 90 millones de euros. "Y en el más pesimista, la necesidad de construir una nueva planta exigiría una inversión mínima de 170 millones de euros", ha precisado.
Un desembolso que, ha asegurado Royo, se requieren en el "peor momento posible" al estar Ecociudad endeudada, con unas pérdidas, a 30 de septiembre, de dos millones de euros; "un Gobierno de Natalia Chueca que ha priorizado asuntos como La Romareda o la reforma del Huerva con más rédito electoral que una inversión de este calibre que afecta directamente a la sostenibilidad del Ebro y con una política dócil y entregada ante el Gobierno de Aragón".
"No hay problema --ha dicho-- en que el Gobierno de Aragón remoce las riberas del Huerva con una aportación de 20 millones de euros, para quién sabe si poblarlo de quioscos como en el Parque Grande, pero sigue sin comprometer un plan financiero que permita a Zaragoza abordar este problema", ha diferenciado Royo.
En ese sentido, el concejal socialista ha recriminado que el Gobierno de Zaragoza haya "abandonado esa actitud reivindicativa" que mostraba en otros momentos ante el Ejecutivo aragonés en materia de saneamiento. "El Ayuntamiento de Zaragoza se ha olvidado de llevar estos asuntos a la bilateral y ha dejado de considerar fundamental que todo el dinero recaudado por el Impuesto Medioambiental sobre Aguas Residuales (IMAR) repercuta en inversiones en Zaragoza", ha criticado.
SOLUCIÓN ANTE EL IMAR
De hecho, Royo ha criticado la "docilidad" que el Gobierno de la ciudad y la alcaldesa, Natalia Chueca, ha mostrado ante el Gobierno de Aragón respecto a la situación de doble imposición que se había generado con el IMAR y la tarifa de Ecociudad a los residentes de Garrapinillos y Casetas.
"Estos vecinos, que son de Zaragoza, habían visto cómo el Gobierno de Aragón les giraba los recibos del IMAR sin la bonificación del 40 por ciento que la propia ley recoge para los zaragozanos y se les cobraba también la tarifa de Ecociudad, produciéndose un trato desigual que debía resolverse", ha señalado.
Como solución, el Gobierno de la ciudad ha aceptado devolver parte de la tarifa mientras el Gobierno de Aragón continuará girando el IMAR "sin bonificación con la excusa" de que Garrapinillos y Casetas vierten en la depuradora de Utebo, dependiente del Gobierno de Aragón.
Una "docilidad" ante el Gobierno autonómico que, para los socialistas, es "injusta, de dudosa legalidad y, sobre todo, incomprensible", ya que es el artículo 32 de la ley del IMAR el que establece que los vecinos de Zaragoza tienen derecho a una bonificación del 40 por ciento de la cuota.
Para Royo, es el Gobierno de Aragón quien se ha "saltado la ley y cobrado, de forma indebida, a estos vecinos el cien por cien del IMAR", por lo que "no se entiende bajo ningún concepto que el Gobierno de Chueca haya aceptado sin rechistar asumir ese cobro indebido".
"Lo que debería es haber solucionado el problema a los vecinos y haber ejercido acciones judiciales para reclamar al Gobierno de Aragón estas cantidades que, según sabemos, superarían los 500.000 euros, aproximadamente", ha manifestado. "Y más, cuando existen municipios del entorno de Zaragoza que vierten en nuestras instalaciones de La Cartuja y La Almozara sin que el Ayuntamiento de Zaragoza reciba cantidad alguna por ello", ha agregado.
Royo ha mostrado su sorpresa por el comportamiento de Natalia Chueca cuando el entonces alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, exigía que los importes íntegros del IMAR recaudados en Zaragoza repercutiesen por completo en inversiones en la ciudad.