ZARAGOZA 19 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de Quirónsalud Zaragoza cumple este mes de noviembre 35 años ofreciendo asistencia integral a aquellos pacientes que se encuentran en estado grave o requieren vigilancia y monitorización tras una cirugía compleja, dentro de un centro hospitalario que tiene como uno de sus objetivos principales humanizar este espacio y mejorar el bienestar de los enfermos.
Además de la humanización del servicio individualizando la atención, otro pilar fundamental es la relación y colaboración de la UCI con el resto de áreas del hospital, han informado desde el centro.
Así, Quirónsalud Zaragoza vela por la calidad de vida de las personas ingresadas, atendiendo las urgencias producidas en cualquier punto del hospital durante 24 horas los siete días de la semana.
Por otro lado, en cuanto a los pacientes más inestables ingresados en el hospital, a través del programa 'Una UCI sin paredes', el centro controla a aquellos enfermos con riesgo de deterioro clínico, para poder así detectar un posible empeoramiento de manera precoz.
ABORDAJE BIO-PSICO-SOCIAL DE LA SALUD
Desde el centro apuestan por "sensibilizar el servicio de cuidados intensivos poniendo el foco en la persona, preservando su dignidad y respetando sus valores", ha explicado el doctor Jesús Cortés Soler, jefe de la Unidad de Cuidados Intensivos.
"Se viven experiencias personales difíciles en las que quizás necesitamos un trato más cercano, así como que se tengan en cuenta nuestras emociones", ha continuado.
En este sentido, los pacientes pueden recibir visitas en dos ocasiones al día: una por la mañana, tras recibir la información actualizada de la situación por parte del médico, y otra por la tarde.
El contacto telefónico es también fundamental a la hora de comunicar cualquier cambio en la situación. Además, se lleva a cabo un abordaje bio-psico-social de la salud que no se centra únicamente en el aspecto biológico.
"Por ejemplo, cuidamos especialmente la información entre médico, paciente y familia.
Esto requiere habilidades comunicativas para saber transmitir datos técnicos y complejos con un lenguaje sencillo y fácil de entender. Asimismo, es importante informar del diagnóstico y el pronóstico teniendo en cuenta el alto contenido emocional del mensaje", ha señalado Cortés.
ÚLTIMA TECNOLOGÍA
Además, la UCI de Quirónsalud Zaragoza ha creado un ambiente cálido y humano con la finalidad de sobrellevar la alta tecnificación de las diversas unidades.
El doctor ha aclarado que "se han orientado los esfuerzos en adecuar la disposición de la zona, las condiciones ambientales, la temperatura, los materiales o el mobiliario a las necesidades de los pacientes y de los profesionales".
De este modo, el espacio se divide en boxes individuales cerrados, que posibilitan el trabajo de varias personas, y cuenta con el mobiliario y equipamiento necesario.
Por otro lado, "el desarrollo de las competencias referentes a los cuidados al final de la vida es otro aspecto esencial, ayudando a reducir el dolor en los casos en los que se precisan cuidados paliativos", ha indicado.
Con respecto a la prevención, la Unidad también dispone de "un avanzado sistema de gestión de hemoderivados y trabaja para evitar infecciones asociadas a la asistencia sanitaria en pacientes críticos bajo el proyecto 'Tolerancia Zero en la UCI'", ha concretado.