EJEA (ZARAGOZA), 21 May. (EUROPA PRESS) -
"El sistema de voto del PSOE para elegir a su secretario general no tiene trampa ni cartón", ha señalado el líder de los socialistas en Aragón, Javier Lambán. Ha asegurado estar "muy orgulloso" de pertenecer a la formación y ha agregado que "hoy toca elegir y mañana unir".
Tras estas palabras en la localidad zaragozana de Ejea de los Caballeros, el también presidente de Aragón ha ejercido su derecho a voto en las primarias del PSOE para la elección del secretario general del partido. Un total de 7.953 militantes aragoneses están llamados a participar en este proceso, para el que se han habilitado 247 centros en la Comunidad.
Lambán ha indicado que el PSOE "una vez más está haciendo historia en la democracia del país" poniendo en funcionamiento, por segunda vez, una fórmula para la elección de su secretario general que "ninguna otra formación política pone en funcionamiento".
"Otras formaciones eligen a sus secretarios generales mediante consultas a través de las redes, difícilmente homologables a lo que es la elección de los cargos institucionales del país que es mediante el voto presencial. El voto del Partido Socialista para elegir a su secretario general no tiene ni trampa ni cartón", ha agregado.
Además, ha opinado que, a tenor de los avales, estas primarias van a contar con una participación altísima, "como ninguna otra formación ha sido capaz de promover en este país". Por ello, ha apuntado que está "muy orgulloso" del PSOE y ha confiado en que "a partir de mañana sigamos dando ejemplo".
"Hoy toca elegir y mañana toca unir, recuperar la concordia, recuperar unas relaciones entre nosotros basadas en la camaradería, en la solidaridad", ha apostillado. En este contexto, Lambán ha confiado en que del próximo Congreso federal del PSOE salga "el proyecto político" y el "liderazgo" que España necesita para relevar al Partido Popular del Gobierno.
Por otra parte, Lambán ha llamado la atención sobre el primer reglamento de la agrupación socialista de Ejea, del 1 de marzo de 1929, en el que se dice que "los que obedeciendo a un fin calamitoso acusen a otros afiliados del partido, y se pruebe su mala fe, se les expulsará".