ZARAGOZA 30 Ago. (EUROPA PRESS) -
La portavoz municipal de ZeC, Elena Tomás, ha asegurado que la marcha de la multinacional Becton Dickinson, cuando estaba a punto de finalizar las obras de la primera fase de su nueva fábrica de jeringuillas en la capital aragonesa, demuestra que "el urbanismo a la carta" y las bonificaciones fiscales "no es lo que atrae a estas empresas", en referencia a la rebaja de hasta el 95% en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), el Impuesto de Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO) y el Impuesto de Actividades Económicas (IAE) aprobada por el Gobierno municipal para las compañías que invirtieran y crearan empleo en la ciudad.
El Gobierno de Aragón confirmó este jueves la decisión de la multinacional sanitaria de echarse atrás y cancelar la construcción de la fabrica en el polígono Empresarium, lo que consideró una "mala noticia", pero achacó a una decisión "estrictamente empresarial" adoptada "desde muy lejos de Zaragoza ante un mal comportamiento bursátil", en palabras del director general de Política Económica, Javier Martínez.
Elena Tomás, por su parte, ha recordado que Becton Dickinson fue una de las empresas "de especial interés municipal" que se benefició de bonificaciones fiscales durante el Gobierno de Jorge Azcón en la ciudad.
"A partir de ahora, lo que veremos en nuestra ciudad es un esqueleto que nos recordará otro fracaso más del PP en esta ciudad", ha concluido.