Si no hubiera transferencias sociales y pensiones la tasa de riesgo de pobreza en Asturias pasaría del 18,6% al 48,0%
OVIEDO, 17 Oct. (EUROPA PRESS) -
El 25% de la población asturiana está en situación de riesgo de pobreza y exclusión, lo que supone alrededor de 250.000 personas o, lo que es lo mismo, uno de cuatro habitantes. En el conjunto de España, la población en riesgo de pobreza en 2023 ascendió al 26,5%.
Son datos recogidos por la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social en Asturias (EAPN-AS), que, coincidiendo con el Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza, ha presentado este jueves en la Junta General el XIV Informe 'El Estado de la Pobreza en España y Asturias. Seguimiento de los indicadores de la Agenda 2030 UE 2015-2023'.
La presentación ha contado con la presencia del presidente del Parlamento, Juan Cofiño, y la presidenta de EAPN Asturias, Elena Rúa, además de las técnicas de la entidad, Loreto Ventosa y Mariluz Rivero. Al acto de presentación, además de representantes de todos los grupos parlamentarios, ha asistido la consejera de Derechos Sociales y Bienestar, Marta del Arco.
El informe recoge como el 25% de la población en Asturias está en situación de riesgo de pobreza y/o exclusión, lo que supone un 0,3% menos respecto a 2022, pero un 12,4% más que en el 2015 y muy lejos de la consecución de los objetivos de la Agenda 2030.
Por otro lado, también se puede ver como ese índice es mayor en mujeres (27%) que en hombres (22,8%), mientras que por edad aumenta en los menores de 18 años (35,4%) y disminuye en los mayores de 65 (14,1). Entre la población de 18 a 64 años el porcentaje se sitúa en un 27,6. Además de la brecha de género y por edad, Rúa ha explicado que si se analiza por concejos también se puede observar una brecha más acentuada en las zonas rurales que en las urbanas.
Analizando los indicadores por separado, la tasa de riesgo de pobreza alcanza al 18,6% de la población asturiana --en el conjunto de España es de 20,2%--. Los datos suponen un descenso respecto al 2022, pero un aumento del 13,2% al 18,6% desde 2008. Por otro lado, de ese porcentaje, el 10,3 están en pobreza no severa y el 8,4 en pobreza severa --hogares con ingresos menores a 611 euros por unidad de consumo al mes--.
En relación con los datos de naturaleza laboral, Asturias sigue siendo la cuarta comunidad autónoma con un peor desempeño, por detrás de las ciudades autónomas de Ceuta, Melilla y la Comunidad Autónoma de Canarias. En Asturias, el 13,6% de la población menor de 65 años vive en hogares con baja intensidad de empleo --5,2 puntos más que la media estatal--. Además, hay un aumento respecto al 2022 del 7,1%, lo que supone el cuarto mayor a nivel nacional.
Con respecto a los datos de Privación Material y Social Severa, Asturias aumenta su tasa hasta el 6,5% de la población --2,1% más que en 2022--. Aunque la mitad de estas personas tienen ingresos por encima del umbral de pobreza, el aumento del coste de la vida ha neutralizado el aumento de renta media que se ha producido en los últimos años. Así, en el año 2023, las personas pobres dedicaban el 37,3% de sus ingresos a gastos relacionados con la vivienda.
Por último, se destaca el papel de las transferencias sociales como barrera ante la exclusión social. Si no hubiera transferencias sociales y pensiones para el 2023 la tasa de riesgo de pobreza en Asturias pasaría del 18,6% al 48,0%. Si mantuviéramos las pensiones y eliminásemos el resto de las transferencias sociales, como el IMV o el Salario Social, la tasa de pobreza aumentaría del 18,6% al 23,9%.
En ese sentido, Rúa ha calificado como un "reto" poner en marcha una 'Estrategia Asturiana de Lucha contra la Pobreza' que aborde de forma integral políticas públicas como las ayudas sociales, pero teniendo en cuenta también la vivienda, el empleo, la igualdad o la juventud.
Por otro lado, durante su intervención, el presidente de la Junta General, Juan Cofiño, ha recordado que la pobreza "es sinónimo de desigualdad" y ha afirmado que el empobrecimiento de las clases medias pone en peligro la democracia liberal. Así, aunque ha destacado como Europa ha trabajado a lo largo de su historia para atajar la brecha entre ricos y pobres, en este momento se está "deconstruyendo el estado de bienestar".