OVIEDO, 13 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Coordinadora Ecologista de Asturias ha exigido este viernes al Gobierno de Asturias y a la Confederación Hidrográfica la investigación "sin demora del impacto y afecciones del derrumbe de la mina de oro de Boinas en el concejo de Belmonte de Miranda y sus efectos secundarios, que se pueden agravar en cuanto empiecen las lluvias".
Desde el colectivo afirman que este desmonte de la ladera demuestra la falta de control por parte de la minera y del Servicio de Minas del Principado de los impactos de la actividad minera cuando hace meses que no llueve en condiciones para poder justificar el derrumbe. Por ello se preguntan qué disculpa van a dar para "este gran derrumbe que puede inutilizar la balsa de residuos de la mina y su planta de tratamiento".
"Hay que recordar que la balsa afectada acumula miles de toneladas de lodos cianurados que son extremadamente peligrosos y que tienen una toxicidad de 75 años, que está ubicada en la cabecera de un afluente del río Narcea, que podría verse afectado por filtraciones o rotura de la balsa dañada", alertan los ecologistas a través de una nota en la que recuerdan además que los lodos tóxicos almacenados en la balsa afectada tienen un efecto carcinógeno y son muy tóxicos para los seres vivos del agua con un carácter acumulativo.
También insisten desde la Coordinadora en que no se puede obviar que la compañía que ya explota los yacimientos de Belmonte y Salas desde 2011, "acumula varias sanciones por contaminar las aguas por sus continuos vertidos de arsénico y selenio que el Principado y el Ayuntamiento de Belmonte le permiten a pesar de que se producen desde que empezó a funcionar esta minera".
Aseguran los ecologistas que se "están produciendo graves daños a la cuenca del Narcea, por los continuos incumplimientos de las condiciones ambientales impuestas, tal como hemos denunciado reiteradas veces".