OVIEDO 19 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Museo de Bellas Artes de Asturias acoge la exposición 'Landscapes of affection', el proyecto específico número diecinueve con el que la institución asturiana apuesta por el arte contemporáneo para la creación de una propuesta realizada 'ad hoc' y destinada a los espacios del patio y salas de la planta baja de su sede histórica, el Palacio de Velarde.
La artista elegida ha sido Noemi Iglesias Barrios (Langreo, 1987) quien ha desarrollado una propuesta en la que aborda las problemáticas asociadas a la explotación de minerales y tierras raras, así como la sobreproducción de tecnologías que generan residuos y basura electrónica como consecuencia de una sociedad hiperdigitalizada.
Para ello, esta joven creadora asturiana se ha centrado en la minería metalúrgica, la urbana y la de datos con el fin de desarrollar un cuerpo de obra multidisciplinar que le ha permitido establecer sugerentes conexiones entre materialidades y estéticas, justicia ambiental y sostenibilidad.
'Landscapes of Affection' se desarrolla en tres ambientes de la pinacoteca asturiana. El patio del Palacio de Velarde, lugar que se configura como un espacio de exploración en torno a las connotaciones asociadas al azul cobalto donde algunas obras pertenecientes a la propia colección del museo regional, como la Inmaculada Concepción de Miguel Jacinto Meléndez o un plato de la Real Fábrica de Sargadelos, permiten hilar una clara relación entre el pasado y el presente y, por lo tanto, entre la colección del Museo y la contemporánea creación de Noemi Iglesias.
El segundo espacio, la sala A, presenta el resultado de las investigaciones que la artista llevó a cabo en las Minas de cobalto de Blaafarveværket, ubicadas en Amot, en la localidad noruega de Modum.
En esta misma línea se encuentra la obra que da título a la exposición, 'Landscapes of Affection', una instalación compuesta por carcasas de móviles, también realizadas en porcelana, sobre las que se inscribe un lenguaje que traduce los movimientos de los dedos al interactuar con las pantallas de los dispositivos digitales.
Por último, en la sala B la artista evoca la atmósfera esotérica del salón de una vidente, estableciendo conexiones entre la minería de datos y los minerales, considerados elementos asociados a la magia y la futurología.
La muestra estará presente en el Museo de Bellas Artes de Asturias hasta el 23 de marzo de 2025. Cuenta con un catálogo sobre el que ya se está trabajando y que será presentado en el encuentro que la artista y la comisaria mantendrán el próximo 20 de febrero. Del mismo modo, en torno a la muestra se programarán diferentes actividades y talleres que se presentarán a comienzos de año.