OVIEDO 31 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno asturiano, el socialista Javier Fernández, ha negado este viernes que la rebaja del impuesto de Sucesiones en Asturias pactada con el PP sea temeraria, tal y como le reprocha IU. El presidente asturiano ha dicho que no puede ignorar la realidad fiscal del país, donde las comunidades autónomas o bien lo han reducido o bien lo han eliminado.
Fernández se ha pronunciado en estos términos en el pleno de la Junta General del Principado de Asturias (JGPA) al responder a una pregunta de portavoz de IU, Gaspar Llamazares, sobre las rebajas fiscales pactadas con el PP.
En su respuesta, el dirigente asturiano ha dicho que se calcula en unos 30 millones de euros el coste de las rebajas, algo que se notará en el ejercicio de 2018. En el pacto presupuestario con el PP se elevó el mínimo exento para herederos directos hasta los 200.000 euros, mientras que ahora se impulsa una ley comprometida con los 'populares' para elevarlo a los 300.000 euros.
El dirigente socialista ha explicado a Llamazares el escenario de las comunidades autónomas vecinas de Asturias. Mientras que en Castilla y León el impuesto está en parámetros parecidos, en Galicia el umbral está aún más alto y en Cantabria prácticamente se ha eliminado el impuesto.
"Usted puede hablar desde ahí, pero yo tengo que gobernar", le ha dicho Fernández a Llamazares, al que ha recordado que tuvo que buscar un acuerdo con el PP porque IU decidió rechazar el proyecto presupuestario.
Llamazares, sin embargo, dijo que la reforma era una "rebaja temeraria" que va a pagar Asturias en los próximos años, con la pérdida de recursos, en lo que ha calificado de "mal negocio". Ha mostrado su preocupación por la rebaja en un impuesto que es solidario y que busca la redistribución de la riqueza.
"La rebaja de impuestos no es de izquierdas", ha dicho Llamazares, que ha insistido en que la reforma va en la línea de la insolidaridad al "entronizar la herencia frente al esfuerzo".