OVIEDO, 2 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Fiscalía del Principado de Asturias ha solicitado prisión e inhabilitación durante seis años para dos médicos acusados de un delito de homicidio por imprudencia por la muerte de un hombre en enero de 2015 a consecuencia de la gripe A. La vista oral se celebrará el próximo 8 de noviembre de 2017 en el Juzgado de lo Penal número 2 de Oviedo, a las 9.30 horas.
En nota de prensa el Ministerio Fiscal sostiene que la víctima acudió en varias ocasiones al centro de salud porque se encontraba mal, sin que los médicos que lo atendieron confirmasen ni desmintieran que se trataba de gripe A.
Como consecuencia del alarmante agravamiento del estado de salud del enfermo, en los días sucesivos su madre decidió llamar al Centro de Salud para requerir asistencia médica domiciliaria con carácter urgente, siendo atendida telefónicamente por el médico de guardia, el acusado 1, quien "omitiendo las más elementales normas de la medicina, tras informarle de que 'su hijo estaba muy mal, que su piel había cambiado de color, que se había desmayado y que tenía mucha tos', le contestó que el tratamiento prescrito por la médico era el correcto para los síntomas que presentaba su hijo".
Tampoco lo derivó a ningún centro hospitalario ni le ofreció una ambulancia. Ese mismo día y como consecuencia del extremo empeoramiento del estado de salud que estaba sufriendo su hijo, la madre decidió llamar al 112 para requerir asistencia médica domiciliaria con carácter urgente, siendo derivada la llamada a la médico de guardia del Centro de Salud de Oviedo. La también acusada 2, quien, "obviando la más elementales normas de la lex artis de la medicina", una vez le hubo informado la madre de que su hijo "estaba consciente pero no podía hablar, estaba negrín, hinchado y tenía mucha fiebre, no respiraba, tenía 39 grados y vomitaba sangre", se negó a acudir a su domicilio, así como a enviar una ambulancia al mismo o derivarle a un centro hospitalario.
Una hora después, desde su domicilio particular, la acusada 2 llamó al domicilio para saber cómo estaba siendo la evolución del ahora fallecido, informándole la madre de que su hijo estaba tosiendo sangre. La acusada en esta ocasión le recetó jarabe para la tos.
Ante la impotencia de no ser atendido su hijo domiciliariamente por ningún médico, a pesar de las llamadas realizadas, la madre decidió llevar por su propia cuenta en coche a su hijo al Hospital Central Universitario de Asturias (HUCA), donde ingresó sobre las 22.57 horas del día 15 de enero de 2014 en el servicio de urgencias. Fue directamente intubado, sedado e ingresado en la UCI en estado crítico, donde permaneció hasta su fallecimiento, el día 10 de febrero de 2014.
La Fiscalía considera que los hechos son constitutivos de un delito de homicidio por imprudencia y solicita que se condene a cada uno de los acusados a cuatro años de prisión, inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena, inhabilitación especial para el ejercicio de la medicina durante seis años y abono de las costas procesales.
El Ministerio Fiscal solicita igualmente que los acusados, de forma conjunta y solidaria, indemnicen a la madre de la víctima con 100.000 euros, más los intereses legales correspondientes.