Con la subida del mínimo exento a 200.000 euros se estima que la cifra se reduzca hasta las 400 personas
OVIEDO, 4 Mar. (EUROPA PRESS) -
La media de asturianos herederos de primer grado que tuvieron que abonar en Asturias el Impuesto de Sucesiones de 2012 a 2015 fue de 821 personas, una cifra que la Consejería de Hacienda y Sector Público del Principado estima se verá reducida en 2017 a algo más de 400 personas con la subida del mínimo exento a los 200.000 euros.
Las mismas fuentes estiman que una vez se establezca en 300.000 euros ese mínimo exento serán poco más de 220 los herederos de primer grado que se vean obligados a abonar el tributo en la región.
La media de los últimos años -de 2012 a 2015_recoge que han sido 28.759 declarantes del impuesto de sucesiones en Asturias. De esa cifra son 4.191 los que tienen una cuota positiva, es decir, les corresponde pagar dicho tributo, según los datos ofrecidos por la Consejería de Hacienda y Sector Público a Europa Press. En cuanto a la recaudación, según datos de la Consejería la media ingresada por este tributo en 2016 ascendería a unos 94 millones de euros, cifra en la que se incluyen pagos atrasados.
Con el mínimo exento hasta 200.000 contemplada en el Presupuesto de 2017, la cifra de declarantes caerá -siempre según estimaciones de la consejería-- hasta los 421, siendo unos 3.700 los declarantes que contarán con una cuota positiva, es decir con resultado a pagar.
Los detractores de este tributo en la región han protagonizado esta semana una multitudinaria concentración en las inmediaciones del parlamento asturiano exigiendo la abolición de un impuesto que consideran "injusto" a todas luces, más aún si se compara con las comunidades vecinas.
La plataforma que promueve la abolición del pago de sucesiones ha entregado en el registro de la Cámara más de 108.000 firmas apoyando su petición y están dispuestos a seguir adelante en su lucha. Así, el siguiente paso que tienen en mente es acudir a Madrid unidos a quienes también se oponen al pago de este tributo en Andalucía y Extremadura.
No descartan tampoco la creación de un "partido apolítico" cuyo único objetivo sea el de llegar a la Cámara para suprimir el impuesto.