El Gobierno local renuncia a la ayuda europea para priorizar que los alumnos vuelvan antes a las aulas
GIJÓN, 15 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Gijón ha anunciado este viernes el diseño de un nuevo proyecto para la reforma del colegio Rey Pelayo que permitirá compatibilizar las obras con la actividad escolar desde mayo de 2025, lo que permitirá la vuelta de los alumnos a las aulas.
Así se lo trasmitió el concejal de Infraestructuras Urbanas y Rurales, Gilberto Villoria, a la comunidad educativa del centro en una reunión mantenida en este día, según una nota de prensa del Consistorio gijonés.
Cabe recordar que el colegio tuvo que ser cerrado en enero de 2023 tras el derrumbe del suelo de un aula de Infantil. Desde entonces, los alumnos fueron repartidos entre los colegios del Llano y Escuelona. Si bien el Principado ya inició la obra para corregir esta situación y acabará en enero próximo, faltaba que el Ayuntamiento gijonés llevara a cabo una reforma más profunda, con un plazo mayor de ejecución.
En un inicio, desde el Gobierno local se había insistido en que los técnicos desaconsejaban, por un tema de seguridad, el poder compatibilizar las obras con las clases, si bien ahora se ha optado por priorizar la vuelta de los alumnos con un cambio en el proyecto que les obliga a renunciar a la ayuda de tres millones de fondos europeos.
Villoria ha explicado en la citada reunión el alcance de los trabajos, que mejorarán la seguridad, habitabilidad y accesibilidad del centro e implicarán una inversión de 1,7 millones de euros. Con el proyecto anterior, el coste era de unos 11 millones, de los que tres millones correspondía a la ayuda europea.
"Este Gobierno no se va a quedar parado mientras una comunidad educativa corre el riesgo de desaparecer", ha remarcado el edil sobre el descenso paulatino del número de alumnos según se van a graduando y no se abren nuevas matriculaciones. En este sentido, las obras darán comienzo en mayo de 2025 y serán compatibles en todo momento con el curso escolar.
De esta forma, durante los meses de verano, aprovechando las vacaciones escolares, se intensificarán los trabajos en la segunda planta para que esta pueda entrar en servicio de forma definitiva en el mes de septiembre, coincidiendo con el inicio de las clases.
El proyecto, que se financiará íntegramente con fondos propios del Ayuntamiento, supondrán una renovación integral del colegio Rey Pelayo que incluye el refuerzo estructural, la puesta al día de las instalaciones de electricidad, fontanería y protección contra incendios y la mejora de la accesibilidad.
A ello se sumará también una mejor habitabilidad, generando un patio diferenciado para los alumnos de infantil y nuevas zonas verdes en el patio común.
"Ante un plan de obra como el heredado, que implicaba la vuelta de los alumnos al centro en enero de 2028, hemos logrado una fórmula que permite que la comunidad recupere el colegio en las mejores condiciones y en el más absoluto corto plazo", ha resaltado Villoria, quien agradeció a la Dirección del centro y el resto de la comunidad educativa la actitud y colaboración mostrada a lo largo de este proceso. La idea es que los trabajos de reforma estén finalizados a principios 2026.