OVIEDO, 4 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Fiscalía de Área de Gijón ha solicitado 8 años de prisión y la prohibición de residir en Asturias durante 10 años, para un procesado por intentar matar a su pareja en Gijón en 2020, después de que ella le dijera que quería romper la relación.
La vista oral está señalada este martes, 5 de julio, en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial, con sede en Oviedo, a las 10.00 horas.
El Ministerio Fiscal sostiene que el procesado (1952) mantenía una relación sentimental con la mujer, de 63 años, desde hacía unos 39 años. Ambos convivían en el piso, propiedad de la mujer, en Gijón.
A finales de agosto o principios de septiembre de 2020, ella le comunicó que ya no quería continuar conviviendo con él y que debía abandonar la vivienda, acordando que el día 16 de septiembre de 2020, el procesado realizaría la mudanza para trasladarse.
El procesado, que no asumió la decisión de poner fin a la relación y a la convivencia, el 16 de septiembre de 2020, sobre las 6:40 horas, cuando la mujer se encontraba en la cama, entró en la habitación y, sin decirle nada y con ánimo de acabar con su vida, la agarró del pelo, tirando de su cabeza hacia atrás. A continuación, la cogió con fuerza del cuello y, con la otra mano, en la que portaba un cuchillo de cocina de unos 15 centímetros de hoja, comenzó a asestarle cuchilladas dirigidas a la zona del cuello, pecho y abdomen.
La mujer interpuso sus brazos para defenderse, al tiempo que le decía: "qué haces, me vas a matar". Como consecuencia de la agresión, la hoja del cuchillo que llevaba el procesado se rompió, así que lo tiró al suelo y abandonó la habitación para dirigirse a la cocina, donde cogió otro cuchillo de sierra, con una hoja de unos 20 centímetros.
La mujer intentó entonces abandonar el domicilio, dirigiéndose hacia la puerta, aunque fue alcanzada por el procesado, que le asestó nuevas cuchilladas a los brazos y en la cabeza.
Ya en el rellano, mientras la víctima pedía auxilio a gritos a sus vecinos, el procesado consiguió arrinconarla contra la pared y continuó asestándole cuchilladas, cayendo ella al suelo. Tras oír sus gritos, un vecino salió al descansillo y, al ver lo que ocurría, intentó inmovilizar al procesado, ayudado por el hermano de la mujer, que también residía en el inmueble y había oído los gritos de auxilio.
Entre ambos consiguieron quitarle el cuchillo y sujetarlo hasta la llegada de la Policía, a pesar de que el procesado continuaba forcejeando con ellos y lanzándoles golpes.
Como consecuencia de estos hechos, la mujer sufrió múltiples heridas y le quedaron como secuelas varias cicatrices.
El procesado se encuentra en prisión provisional por estos hechos desde el 18 de septiembre de 2020. La Fiscalía considera que los hechos narrados son constitutivos de un delito de homicidio en grado de tentativa. Concurre en el procesado la circunstancia agravante de parentesco, así como la de desprecio de género, respecto del delito de tentativa de homicidio.