MADRID/OVIEDO, 21 Abr. (EUROPA PRESS) -
La presidenta del Colegio de Ingenieros de Montes, Rosa Planelles, ha vinculado este viernes los incendios declarados en Asturias con el cambio de la norma autonómica que permitió suprimir los acotamientos de pastos.
Planelles ha respondido a preguntas de Europa Press, tras conocerse que el primer trimestre de 2017 se ha registrado un incremento significativo de los incendios forestales, ya que hasta el 31 de marzo han ardido 11.593 hectáreas de superficie, es decir, nueve veces y media más que en el mismo periodo de 2016 (1.224 hectáreas), según datos del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (MAPAMA).
Tras mencionar la meteorología como causa del incremento, se ha referido alc aso de Asturias, en el que ha dejado entrever que una de las causas podría estar también en un cambio en la ley asturiana que permite a los ganaderos entrar en zonas quemadas y que podría "quizá" estar relacionado con el aumento de los fuegos.
Así, Planelles ha señalado que están creciendo las críticas a este cambio normativo pero considera que es "demasiado reciente como para ser concluyente" su vinculación al fuego. "Es una posibilidad", ha dicho.
Sobre las cifras ofrecidas por el Ministerio, cabe señalar que son inferiores a la media de los últimos diez años en este plazo, que se sitúa en 18.948 hectáreas, es decir, un 38,81 por ciento menos.
En cuanto al número de fuegos, entre el 1 de enero y el 31 de marzo se han producido 2.324 siniestros, más del triple que en el mismo periodo de 2016 (3,15 veces).
De estos, 1.412 fueron conatos (de menos de una hectárea) y 1.312 siniestros, fuegos de más de una hectárea de superficie sin que ninguno haya llegado a rebasar la cifra de 500 hectáreas, donde se sitúa la barrera de grandes incendios forestales. A estas alturas del año, la media de los últimos diez años suele haber dos grandes incendios.
Del total de hectáreas arrasadas, el tipo más afectado es de la superficie matorral y monte abierto, con 8.864 hectáreas quemadas, seguida por la superficie arbolada, que perdió 1.621 hectáreas y otras 1.621 hectáreas de pastos y dehesas.
En su conjunto, el fuego ha afectado en el primer trimestre de 2017 al 0,042 por ciento de la superficie total del país. Por ámbito geográfico, el 56,75 por ciento de los siniestros se produjo en el noroeste; el 35,35 por ciento en las comunidades interiores; el 7,60 por ciento en el Mediterráneo y apenas un 0,29 por ciento en Canarias.
Del total de superficie forestal, el 73,5 por ciento se quemó en el noroeste, el 21,54 por ciento en las comunidades interiores y el 4,96 por ciento en las comunidades mediterráneas.
2017 NO PINTA BIEN
En este contexto, la portavoz de incendios del Colegio de Ingenieros de Montes, Rosa Planelles, ha explicado a Europa Press que estas cifras se deben a las condiciones meteorológicas que están siendo "muy duras", ya que en el noroeste hay más sequía porque apenas ha llovido de modo que prácticamente toda la superficie se ha quemado en el norte de la Península.
Además de la meteorología adversa, con altas temperaturas, vientos fuertes del sur y gran acumulación de vegetación, admite que en estas fechas los dispositivos de extinción de las comunidades autónomas y del Estado "no están al máximo", sino que estima que se mantendrán en torno al 30 por ciento, puesto que las campañas se planifican con estadísticas históricas, no con eventualidades.
Con todo, insiste en que la situación fundamental de estas cifras que casi multiplican por diez las cifras del año pasado se debe a la meteorología.
Si bien, advierte de que la meteorología, de momento, está siendo anómala y adversa y aunque "considera que aún es pronto" y la situación puede reconducirse, la campaña de incendios de 2017 "apunta regular" en el noroeste y especialmente en Galicia, mientras que en Levante "ha llovido un montón" y aún tienen "un mes y pico de tranquilidad".
"No parece que la campaña vaya a ser buena. No pinta bien", admite la portavoz del Colegio de Montes que estima que, según prevén los planes de extinción de incendios, se podrán variar los periodos de riesgo para, por ejemplo, adelantar los operativos de lucha contra el fuego o acelerar la contratación de medios aéreos.
En definitiva, asegura que "hay mecanismos para prepararse antes" porque este año se ha anticipado el calor, ha llovido menos y la vegetación está más seca.
(EUROPA PRESS)