GIJÓN, 13 Ago. (EUROPA PRESS) -
La hembra de tortuga boba rescatada en el puerto de Gijón el 25 de junio por la Red de Varamientos del Principado de Asturias, el personal del puerto y Salvamento Marítimo se recupera favorablemente en el Bioparc Acuario de Gijón bajo la atenta mirada del personal de veterinaria y biología.
Desde hace algo más de un mes y medio la tortuga está siendo tratada por el equipo de veterinaria y biología ya que llegó en muy mal estado y casi inconsciente con una baja respuesta a estímulos. Lo primero que se detectó nada más llegar fue la deshidratación que sufría por lo que una de las primeras actuaciones que se realizó en la cuarentena del Acuario fue hidratarla y estabilizarla.
Además, tenía el caparazón cubierto de algas y cirrípedos (crustáceos marinos parásitos) y numerosas cicatrices antiguas, lo que indica que la tortuga estaba muy debilitada y pasó mucho tiempo a la deriva antes de ser encontrada por el servicio de Salvamento Marítimo, por lo que hubo que retirar todos estos restos.
Tras las pruebas de diagnóstico veterinario realizadas se observó que la tortuga además de muy delgada padecía un proceso respiratorio importante por lo que ha estado con tratamientos varios durante estas semanas.
La tortuga permanece, desde entonces, en la cuarentena del Acuario vigilada 24 horas y con monitorización constante. Su estado mejora día a día, gracias a los cuidados y tratamientos recibidos, y sus analíticas manifiestan que se va estabilizando, aunque todavía no esté totalmente recuperada.