Centro cultural Niemeyer
DAMIÁN ARIENZA

OVIEDO 16 Feb. (EUROPA PRESS) -

La Fiscalía del Principado de Asturias solicita 11 años de prisión y multa de 24.000 euros para el exdirector General del Centro Niemeyer, Natalio Grueso, por presuntas irregularidades durante su etapa en el centro cultural asturiano.

El Ministerio Público le pide la pena de 6 años de prisión, accesoria de inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de condena e inhabilitación absoluta para cualquier contrato con las administraciones públicas o entidades del sector público por tiempo de 10 años, y multa de 9.600 euros por los delitos continuados de malversación en concurso medial con el continuado de falsedad.

La pena de 3 años de prisión por el delito continuado societario, accesoria de inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de condena y multa de 7.200 euros.

Y la pena de 2 años de prisión por el delito de insolvencia punible, accesoria de inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de condena y multa de 7.200 euros.

En la causa de las presuntas irregularidades en la gestión del Niemeyer están investigados: Natalio Grueso, exdirector general del complejo cultural; J. P., exmujer de natalio Grueso; J. M. V. R., el empleado de la agencia de viajes de El Corte Inglés; el exdirector de producción, Marc Martí, y José Luis Rebollo, exsecretario de la Fundación.

La fiscalía pide para la exmujer de Natalio Grueso, J.P., la pena de 2 años y 6 meses de prisión por un delito continuado de malversación; para J.M.V.R., trabajador de Viajes el Corte Inglés la pena de 8 años de prisión y el pago de 15.000 euros de multa por los delitos continuados e malversación en concurso con el continuado de falsedad y el delito de estafa.

Para el exsecretario de la Fundación, José Luis Rebollo, la Fiscalía solicita la pena de 2 años y 3 meses de prisión por el delito continuado societario y el pago de una multa de 7.200 euros y para el exdirector de producción, Marc Martí, pide la pena de 1 año y 6 meses de prisión por un delito de malversación.

LA TRAMA

El Fiscal sostiene que Natalio Grueso se encargó personalmente de toda la gestión de la incipiente Fundación, al contar hasta finales del año 2011 principios del 2012, con la absoluta confianza de tal órgano que, "en dejación de unas correctas funciones de supervisión y control económico, solo prestó atención a las de carácter cultural de las que se daba cuenta en las reuniones del Patronato".

"Sabedor de tal falta de supervisión y control económico, Grueso sirviéndose de la ayuda y colaboración del trabajador de Viajes de El Corte Inglés realizó durante toda su gestión, una serie de gastos, unos totalmente ajenos al fin de la Fundación, por ser eminentemente de tipo personal de ocio, y en todo caso, ajenos al objeto de la misma, y otros, de dudosa vinculación, que cargó al presupuesto de la Fundación", sostiene la Fiscalía.

No obstante, a fin de que las facturas y demás documentos acreditativos de los gastos, no reflejasen ni su auténtica finalidad, ni la fecha y costes globales, la Fiscalía afirma que se concertó con el trabajador de El Corte Inglés para crear, unas veces facturas totalmente falsas y, otras, con alteración sustancial de sus conceptos, lo que permitía que unas no se reflejasen en las cuentas anuales y, otras, se reflejasen bajo conceptos ficticios.

"Tal proceder se llevó a cabo a instancias de Natalio Grueso, y con la realización material por parte del trabajador de Viajes El Corte Inglés, quien materialmente emitía facturas, unas veces con alteración de conceptos, servicios, usuarios y fechas en relación con facturas auténticas emitidas por Viajes El Corte Inglés y, otras, creadas ex novo sin correlación alguna", señala el escrito de acusación.

En el escrito, la Fiscalía aporta facturas por servicios de viajes realizados por la exmujer de Natalio Grueso, sin que la misma tuviese vínculo laboral alguno con la Fundación, que encubrían viajes de naturaleza personal y basados únicamente en su condición de esposa. Algunos de esos viajes tienen destinos como Nueva York (en varias ocasiones), Atenas, Qatar, Lisboa, Paris, Venecia, México, entre otros.

Además también existen facturas de viajes de Natalio Grueso con su madre y su abuela, al sur de Portugal, a Niza, a Barcelona y a Sevilla. En algunos de esos viajes tenían a disposición un chófer de la Fundación.

La Fiscalía aporta también facturas de servicios de viajes realizados por personas ajenas laboralmente con la Fundación, sin que vayan acompañados por persona alguna con vinculación a ésta, y basados únicamente en su condición de familiares o amigos de personal de la Fundación o del secretario del patronato.

EL TÁNDEM GRUESO-EMPLEADO DE VIAJES

Según el fiscal, el empleado de Viajes de El Corte Inglés (VECI) aprovechando la estrecha relación que la unía a Natalio Grueso y sabedor de la no comprobación por parte de éste del estado de las deudas por servicios prestados que la Fundación mantenía con VECI, confeccionó una serie de facturas por las que "cargaba" a la fundación gastos de servicios de clientes suyos, en tanto empleado de VECI, totalmente ajenas a la Fundación y a cualquiera de sus empleados, sin que conste que tales clientes fuesen conocedores de la posterior facturación a la Fundación.

"Todo ello, en ejecución de un plan preconcebido y con la finalidad de evitar decirles a sus clientes que el servicio que habían contratado resultaba más gravoso que el que inicialmente les había dicho y por el que habían pagado. Las facturas así confeccionadas, eran giradas contra la Fundación que, al no existir mecanismo alguno de control interno".

CUENTAS FICTICIAS

El Fiscal sostiene que a efectos de que se pudiesen presentar al Patronato unas cuentas lo más saneadas posibles, y, en todo caso, para ocultar el concepto de los gastos reales, Grueso, en ejecución del acuerdo de voluntades que tenía con el trabajador de VECI, y que a partir del año 2009, contó igualmente con la participación activa de José Luis Rebollo, realizaron los delitos por los que se les acusa para maquillar las cuentas.

En algunos casos llegaron a "destruir facturas originales de VECI", como fue el caso para ocultar los costes reales que para la Fundación tenía el apoyo económico a la película de Woody Allen 'Vicky Cristina Barcelona'.

Desde el año 2007 hasta el año 2012 la Fundación hacía constar cuentas de resultados ficticias en las que no se mostraba la deuda real y mientras tanto año tras año recibían aportaciones de las Administraciones Públicas, Gobierno de Asturias, Ayuntamiento de Avilés y Autoridad Portuaria, entre otros.

El mecanismo de financiación de la Fundación a través de subvención finalista, del Principado de Asturias fue de 500.000,00 euros el ejercicio 2007; de 500.000,00 euros el ejercicio 2008; de 500.000,00 euros el ejercicio 2009; de 570.000,00 euros el ejercicio 2010; y de 1.150.000,00 euros el ejercicio 2011. Así como de 95.000,00 euros vía subvención finalista del Ministerio De Cultura en el año 2008 y en el año 2009, de 85.000,00 euros el 2010; y de 235.000,00 euros el 2011.