La directora de la Sociedad de Geriatría y Gerontología Gregorio Marañón aboga por que hay que potenciar la independencia de las personas mayores
LAREDO, 28 Jul. (EUROPA PRESS) -
El geriatra y director del Centro de Atención a Dependencia (CAD) de Cueto, Nicolás Peña, ha considerado que en Cantabria la gestión de la Ley de Promoción de la Autonomía Personal y de Atención a las personas en situación de dependencia "funciona bien", porque en las residencias hay plazas tanto para los usuarios que necesitan ingresar con urgencia como para las personas mayores con cierto grado de dependencia.
El geriatra añadió que en estos últimos casos "siempre habrá" lista de espera y no se puede ingresar con "inmediatez", por lo que recomendó a las familias que vayan preparando "al menos el papeleo" si es evidente que hay una persona mayor cuya salud se va a ver deteriorada.
Asimismo, Peña valoró de manera muy positiva el hecho de que "las familias cada vez se implican más" con la atención a las personas mayores porque "a diario hay más visitas" y "responden" si desde los CAD se las llama para que acudan a celebraciones que se organizan en las residencias o a consultas en el hospital.
Así se manifestó en el seno del Curso de Verano de la Universidad de Cantabria (UC) '¿Respetamos los profesionales los derechos de las personas mayores?', que codirigen la presidenta y la vicepresidenta de la Sociedad de Geriatría y Gerontología de Cantabria Gregorio Marañón, Ana María Rodríguez y Lourdes Bermejo, respectivamente.
En cualquier caso, el geriatra subrayó que el futuro "ideal" es aquel en el que la atención a las personas mayores se traslade a sus domicilios, destinando las residencias de ancianos a "los grandes dependientes que necesitan grandes cuidados".
Peña afirmó que en la actualidad existen ayudas técnicas para adaptar los hogares o de tele asistencia, tras añadir que son prestaciones "insuficientes" porque a pesar de que "es difícil y caro" hay que tratar de llevar "a los domicilios y barrios más servicios asistenciales", entre los que mencionó los de "catering, lavandería o cuidados de higiene".
Finalmente, Nicolás Peña aseguró que está "convencido" de que las instituciones son garantes de los derechos de las personas mayores, teniendo en cuenta que algunos de estos derechos "se van reduciendo a medida que nos hacemos dependientes", como el de intimidad "si necesitas ayuda para que te duchen" o el de información sanitaria, que se ve afectado si no se les "cuenta todo" porque las familias quieren evitar que "sufran".
Por su parte, Ana María Rodríguez indicó que hay que "llamar la atención sobre los derechos" de las personas mayores, que "son los mismos que los de cualquier ciudadano", algo en lo que "tienen que participar" tanto "instituciones y sociedades de profesionales" como "los ciudadanos y los propios usuarios".
La directora del Sociedad de Geriatría y Gerontología de Cantabria Gregorio Marañón subrayó que "hay que hacer visibles a los mayores" y "potenciar su independencia" con programas como el de "Promoción del Envejecimiento Activo", porque en los países latinos "somos tradicionalmente paternalistas y proteccionistas" con los ancianos, cuando en realidad debemos "ponderarlos".
El Curso de Verano UC '¿Respetamos los profesionales los derechos de las personas mayores?', al que han asistido más de una treintena de alumnos, se clausura mañana en la sede de Laredo.