Procesión de Los Santos Mártires en Santander

Procesión de las  reliquias de los Santos Mártires en Santander
AYUNTAMIENTO DE SANTANDER
Actualizado: lunes, 29 agosto 2016 21:32

   SANTANDER, 29 Ago. (EUROPA PRESS) -

   Las reliquias de los Santos Mártires, patronos de Santander y de su Diócesis, han vuelto a salir un año más de procesión, desde la iglesia del Cristo hasta la Catedral, en la víspera de su festividad, que se celebra este martes, 30 de agosto.

   La procesión ha estado presidida, por segundo año, por monseñor Manuel Sánchez Monge, obispo de Santander, y en la comitiva han participado fieles y miembros de la Corporación de la capital cántabra, como han sido la concejal de Turismo y Relaciones Institucionales, Gema Igual; la de Economía y Hacienda, Ana González Pescador, y la edil regionalista Amparo Coterillo.

    Además, en la jornada del domingo 30, se celebrará la solemnidad de estos dos santos, y hermanos, que fueron martirizados por no renunciar a su fe hacia el año 298, en Calahorra (La Rioja).

   Habrá una misa, a las 12.00 horas, en la Catedral para conmemorar esta festividad.

    San Emeterio y san Celedonio eran oriundos de Calahorra (La Rioja) y sufrieron en esta ciudad el martirio durante la persecución romana de Diocleciano, en torno al año 298. Los hermanos, Emeterio y Celedonio, militaban en las legiones romanas, pero las abandonaron para profesar, públicamente, su fe en Cristo.

   Por ello, fueron llevados ante un tribunal en el que confesaron su fe, lo que les costó el tormento y la cárcel durante algún tiempo. Más tarde, en las afueras de la ciudad, y junto al río Cidacos, afluente del Ebro, sufrieron el martirio y fueron decapitados en una jornada de un 3 de marzo. Allí quedaron sepultados sus restos.

    Posteriormente, las reliquias de los Santos Mártires fueron traídas a Cantabria en la Alta Edad Media para protegerlas de las incursiones árabes, tal como también ocurrió con otras muchas que se veneraban entonces.

   Las reliquias de San Emeterio y San Celedonio estuvieron ocultas durante mucho tiempo bajo la actual Iglesia de El Cristo de Santander, pero en unas excavaciones realizadas en 1531 se hallaron y se encerraron en los dos actuales relicarios para ser expuestas al culto en este templo, donde ahora reposan.

   La devoción a los Santos Mártires no sólo afecta a Santander, ciudad que, probablemente, tomara su nombre de "San-Emeter", sino también a toda la región de Cantabria.

   El Papa Pío VI, a petición del entonces obispo de Santander, monseñor Rafael Tomás Menéndez de Luarca (1784-1819), en un Breve del 30 de septiembre de 1791, los declaró Patronos de la Diócesis de Santander.