TORRELAVEGA 1 Mar. (EUROPA PRESS) -
Más de 130 marceros dieron anoche la bienvenida a la primavera cantando las Marzas en Torrelavega y en presencia de numeroso público, que siguió los cánticos, así como el diálogo del pregonero con la alcaldesa, Lidia Ruiz Salmón, y los nombramientos de Esther García y Gloria Ruiz como Marceras Mayores, a pesar de la intensa lluvia.
Vestidos con la tradicional boina, el pañuelo rojo al cuello y bastón en mano, los marceros recorrieron las calles de la ciudad durante más de dos horas, cantando las Marzas para dar la bienvenida a la primavera y pedir el aguinaldo para los más desfavorecidos, como se acostumbraba a hacer en los pueblos, de donde procede esta tradición, que de forma pionera en Cantabria, recuperó la Ronda Marcera de Torrelavega.
A las nueve en punto, tras haber cantado en la residencia Asilo San José de Torrelavega, en Nueva Ciudad y en otros lugares urbanos, llegaron al Ayuntamiento, donde también esperaban a los marceros los miembros de la corporación municipal, con la alcaldesa al frente, que contemplaba la escena desde el balcón municipal, preparada para mantener el "mordaz e ingenioso" diálogo con el pregonero, Juan José Crespo.
Así, Crespo comenzó la conversación ponderando las virtudes de 'la moza' que es la alcaldesa de Torrelavega quien le respondió "con gracejo" a sus "insinuaciones" en una conversación en la que en todo momento se aludió a la actualidad informativa municipal, "con ironía y humor".
En las intervenciones no faltaron alusiones al anterior alcalde, Ildefonso Calderón, ni a la moción de censura. El diálogo finalizó con un "toque de humor" por parte de Crespo: "si ya lo decía Calderón, que Torrelavega se iba a llenar de salmones, sin saber que un salmón le iba a quitar el bastón".
Tras este momento más "liviano", vino la parte más "emotiva" de la noche: el nombramiento como Marceras Mayores a la "política de raza" Esther García, a título póstumo, y a la "referente intelectual y literaria de Torrelavega", la poetisa Gloria Ruiz, quien recibió el diploma acreditativo dedicando unas palabras a su amiga "a la que tanto echo de menos", dijo.
Unas palabras que conmovieron al público y a los hijos y nietos de Esther García, que subieron a la tarima a recoger el pergamino y le dedicaron unas palabras, calificándola como "mujer de izquierdas convencida, luchadora hasta el final por las desigualdades sociales, enemiga de actos ceremoniosos, halagos y ostentación". Pero, como aseguró su hijo, "hubiera recogido encantada este título porque procede de una fiesta del pueblo, una fiesta popular de la que disfrutó y en la que siempre le gustaba participar".
Tras estos nombramientos, los marceros siguieron cantando, no solo en el Ayuntamiento, sino en la Iglesia de la Asunción, temas como 'De casa salimos, Los Sacramentos de Amor, La Rutona, Buenos Mozos aquí posan, Sino hay oro venga plata, A los de esta casa Dios les de Victoria, Ha venido Marzo, y Adiós, hasta el otro año', hasta la fuente de Cuatro Caños, donde cantaron 'Ha venido Marzo', poniendo punto y final a la fiesta casi entrada la media noche.