SANTANDER/MADRID, 26 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil ha detenido e imputado a 22 personas en el marco de la denominada 'Operación Baner', dirigida por al Juzgado de Instrucción Número 1 de Medio Cudeyo (Cantabria), llevada a cabo en 19 provincias españolas y en la que se ha desarticulado una red de distribución de sustancias medicamentosas, hormonales y anabolizantes, destinadas a deportistas amateurs y profesionales dedicados en su mayoría al culturismo y al fitness.
La mayoría de esas personas, a las que se atribuyen delitos contra la salud pública, han sido imputadas en la Comunidad Valenciana (ocho), pero también en Galicia (cinco), Castilla-La Mancha (tres), Andalucía (dos), Madrid (dos), Aragón (uno) y Extremadura (uno), según han precisado a Europa Press fuentes del instituto armado.
Las investigaciones se iniciaron en el primer trimestre del pasado año tras el análisis de la documentación intervenida en la 'Operación Escudo', que se inició en Cantabria a principios de 2012, cuando la Guardia Civil tuvo conocimiento de que desde una farmacia de la región se estaban comercializando sin prescripción médica este tipo de productos.
En aquella operación, que también fue dirigida por el Juzgado de Instrucción 1 de Medio Cudeyo, se detuvo y se imputaron delitos a 78 personas, se practicaron 72 registros domiciliarios y se intervinieron miles de anabolizantes y sustancias prohibidas (esteroides, hormonas, epo y otras), según ha señalado el Instituto Armado en un comunicado.
Ahora, tras el estudio de la documentación incautada, los investigadores obtuvieron una "importante cantidad", según la Benemérita, de información relativa a personas residentes en España, que podían estar recibiendo envíos que contenían sustancias medicamentosas prohibidas en el deporte, que llegarían a su poder a través redes criminales internacionales que importarían los medicamentos desde Portugal, Asia y Europa del Este.
Durante la investigación, los agentes han podido reconstruir "con precisión", según indican, conductas delictivas que reflejan el 'modus operandi' más generalizado en el tráfico ilícito internacional de anabolizantes.
Este consiste en el empleo de lenguajes convenidos en sus comunicaciones y la falsificación de los datos de las personas vinculadas a los envíos de paquetería urgente en los que se ocultan las sustancias y en las transacciones económicas como pago por éstas.
DAÑOS PSICOLÓGICOS Y FÍSICOS
La Guardia Civil ha advertido en una nota de prensa de que esta comercialización ilegal de medicamentos "incumple gravemente la normativa establecida por las autoridades sanitarias y supone un alto riesgo para la salud de sus consumidores".
En la práctica de las gestiones realizadas para desmantelar la organización, ha resultado concluyente el testimonio prestado por algunos consumidores de estos fármacos, que han expuesto "con toda crudeza" los daños psicológicos y físicos sufridos por la ingesta de tales productos, los cuales les han obligado a someterse a tratamientos médicos, corroborados mediante la presentación de documentación de especialistas (psiquiatras, medicina interna, análisis clínicos y otros).
La operación, dirigida por el Juzgado de Instrucción Número 1 de Medio Cudeyo (Cantabria), ha sido llevada a cabo por la Sección de Consumo y Medio Ambiente de la Unidad Central Operativa, especialistas en investigaciones contra el dopaje en el deporte, apoyados por unidades del mismo cuerpo de las provincias donde se ha desarrollado el operativo.