SANTANDER 15 Oct. (EUROPA PRESS) -
El acusado de abusar sexualmente y lesionar a una menor, de quince años, a la que realizó tocamientos y abofeteó en una discoteca, ha reconocido los hechos y ha aceptado una condena de un año de prisión este martes en el juicio contra él, celebrado en la Audiencia Provincial de Cantabria con acuerdo de las partes.
Además, tras modificar el fiscal su escrito y conclusiones iniciales, y adherirse las acusaciones particulares y la defensa a las mismas, la Sala de la Sección Primera va a imponer al procesado una multa de 960 euros por dos delitos leves de lesiones, a razón de una cuota diaria de 8 euros durante dos meses por cada uno de ellos.
La pena de cárcel es por el delito de abuso sexual, que también implica la inhabilitación especial para desempeñar cualquier oficio que conlleve contacto de menores durante tres años, y se ha rebajado respecto a la anterior petición del ministerio público al aplicarse la reforma del Código Penal por ser más beneficiosa para el enjuiciado.
Esta parte solicitaba en un principio dos años de encarcelamiento, por acercarse a la chica cuando se encontraba en un establecimiento de ocio nocturno y, "con ánimo de satisfacer sus deseos sexuales", agarrarla "el glúteo de forma reiterada" pese a manifestarle ella, "visiblemente molesta y enfadada, que parase de efectuar esos tocamientos".
Sin embargo, él continuó con su actitud, lo que provocó que la menor y su grupo de amigos se encarasen con él de forma agresiva, momento en el que el implicado propinó un golpe con la mano en la boca a la menor, que hizo que sangrase.
Además, agredió a una mujer que intervino entre ambos agarrándola por el cuello y asestándole un golpe con un botellín que tenía en la calle.
Por este delito de abuso sexual a menores y dos delitos leves de lesiones la Fiscalía reclamaba, además de los dos años de prisión -que la acusación particular elevaba a cuatro-, siete de inhabilitación para desempeño con menores y 1.440 euros de multa, pena que se ha rebajado tras el acuerdo entre las partes y la conformidad del procesado, que deberá indemnizar a la víctima por las lesiones y días de curación y al Servicio Cántabro de Salud (SCS) por la atención prestada.
Tras la vista, el tribunal dictará sentencia en base al acuerdo alcanzado y ha decretado ya la firmeza de la misma, al comprometerse todos los letrados a no recurrir el fallo.
La defensa ha avanzado la petición de suspensión de condena a su patrocinado, al carecer de antecedentes penales y ser la pena impuesta inferior a dos años de cárcel, extremo al que no se han opuesto ni el fiscal ni los abogados de la acusación particular y sobre el que la Sala tendrá que resolver.