El estudio realizado confirma la viabilidad de su reapertura, que conllevará hacer obras por un coste estimado de 3 millones de euros
SANTANDER, 29 Ago. (EUROPA PRESS) -
El antiguo túnel desde el barrio de Tetuán al Sardinero, abrirá a principios de 2019 para su uso peatonal y ciclista y, para ello, habrá que realizar diversas obras con un coste estimado de tres millones de euros y entre las que destaca la prolongación del túnel en 70 metros en la zona de la desembocadura de la calle Joaquín Costa.
Aunque primero habrá que hacer estudio geotécnicos y después redactar el proyecto de construcción, el equipo de Gobierno (PP) espera que a comienzos del próximo verano de 2018 las obras puedan estar ya adjudicadas a una empresa con un plazo de ejecución que se estima que sea de ocho meses.
La alcaldesa de Santander, Gema Igual, así lo ha señalado este martes en una rueda de prensa junto al concejal de Infraestructuras, Urbanismo y Vivienda, César Díaz, en la que han anunciado que el estudio de viabilidad urbanística, técnica y económica de la puesta en servicio de este antiguo túnel para su uso peatonal y ciclista ha concluido que "sí se puede abrir el túnel".
Esta reapertura ya se les ha comunicado a los vecinos y hosteleros de Tetuán en una reunión mantenida este mismo martes y, según la alcaldesa, la han recibido con "satisfacción" porque, además de que ser algo que habían pedido, creen que es "una oportunidad para el barrio" que estará conectado con el Sardinero a siete minutos andando.
Igual también se ha congratulado de que se pueda reabrir el túnel, una iniciativa que el PP se comprometió en su programa electoral a estudiar su viabilidad y llevarlo a cabo si era posible, como así será finalmente. "Por eso, es una obra que nos hace ilusión, y con la que seguimos contando la historia de la ciudad de Santander", ha ensalzado.
ANÁLISIS DEL ESTADO DEL TÚNEL
El estudio de viabilidad, que se inició el pasado mes de junio con la apertura de la boca de la zona de Tetuán, ha analizado el estado en que se encuentra el túnel, que estuvo en funcionamiento desde 1892 a 1917 y por el que pasaba un pequeño tranvía de vapor que conectaba el centro de la ciudad con el Sardinero.
Tras dejar de operar el tranvía, fue utilizado como refugio en la Guerra Civil y más tarde como paso peatonal, hasta que sus entradas fueron selladas totalmente en 1986.
En el marco de ese estudio, se ha accedido al túnel tras la apertura de la entrada desde Tetuán y hubo que achicar el agua con bombas porque se encontraba inundado por las filtraciones del terreno. Una vez retirado el agua, Igual ha indicado que se comprobó los primeros metros estaban "en buen estado" y después había ya "más deterioro".
Solo se ha podido acceder hasta los 250 metros del total de 300 que tiene el túnel entre las dos bocas porque había un derrumbe que no permitía avanzar hasta el otro extremo. Pero la alcaldesa ha destacado que se ha podido comprobar que el revestimiento está en "buen estado" en los primeros metros y después "es estable pero los ladrillos están muy erosionados". Sobre las filtraciones de agua, se ha estimado que se acumulan unos 250 metros cúbicos a la semana.
Dentro de la cavidad, hay varios elementos "singulares" que se tratarán de mantener con la actuación que se llevará a cabo como es el caso de una inscripción que indica S.T.V. (posiblemente Sardinero Tranvía a Vapor), así como cinco apartaderos.
ACTUACIÓN
Para la puesta en servicio del túnel, se llevará a cabo una actuación que, con un coste aproximado de unos tres millones de euros, consistirá principalmente en recubrir el suelo, las paredes y la bóveda con "una piel" de 20 centímetros de hormigón para dar seguridad plena a los viandantes y evitar cualquier tipo de desprendimiento, aunque se mantendrá el estado original en los primeros 20 metros desde Tetuán y en "alguno" de los apartaderos.
También se colocará una membrana impermeabilizante y un sistema de drenaje, pero lo más destacado de la actuación es que se prolongará 70 metros el túnel en la zona del Sardinero, en la calle Joaquín Costa. Esto se propone porque esa boca fue tapada con una gran cantidad de tierras creando allí una ladera y que actualmente es una zona ajardinada entre edificios.
Para evitar tener que realizar una excavación de "tremendo impacto", se ha decidido prolongar esos 70 metros a través de un falso túnel. De esta forma, el túnel tendrá un total de 370 metros de largo, unos 3,5 de alto y entre 3.90 y 4 metros de ancho cuando se reabra para su uso peatonal y ciclista.
En el interior, se instalará iluminación, un circuito cerrado de televisión de vigilancia, una red de saneamiento de recogida de aguas pluviales y se está abordando con los vecinos los horarios del túnel para decidir "si sería conveniente cerrarlo por la noche por cuestiones de seguridad", ha indicado Díaz.
Además de estos trabajos de mejora y prolongación del túnel, el edil de Infraestructuras ha avanzado que en las dos salidas se urbanizará el entorno y, en el caso de la boca de Tetuán, se hará una entrada desviada hacia Barrio Camino para permitir la entrada al grupo Las Canteras.