"Que formemos un cerebro colectivo ha hecho que seamos la especie dominante", ha opinado el codirector de las excavaciones de Atapuerca
SANTANDER, 23 Ago. (EUROPA PRESS) -
El coordinador del Programa de Paleobiología de Homínidos del Centro Nacional de Investigación sobre Evolución Humana del CSIC, José María Bermúdez de Castro, ha opinado este miércoles en Santander que es "un gravísimo error" que los científicos empiecen su etapa laboral a los 35 años porque ha defendido que debería producirse entre los 25 y los 35 años, "cuando nuestro cerebros está en las mejores condiciones".
Según informa la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) en un comunicado, Bermúdez de Castro ha explicado la evolución del cerebro en los humanos, de tal forma que "sufre una reorganización entre los 12 y los 25 años", desde los 20 se empiezan a desarrollar capacidades como la planificación o la organización, y es entre los 25-35 cuando está al cien por cien.
Así lo ha dicho en su conferencia en el 'XVII Aula de Verano 'Ortega y Gasset'. Iniciación a la Universidad', en los Cursos de Verano de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP). Esta Aula de Verano recibe cada año a los 100 mejores expedientes académicos de Bachillerato de toda España.
Del mismo modo, el experto ha explicado que "el cerebro es un órgano tremendamente caro" porque "sólo en reposo consume el 20 por ciento de toda la energía de nuestro metabolismo basal". Es decir, que en su opinión "un cerebro más grande de lo que tenemos ahora no sería operativo".
Asimismo, ha considerado en su charla a los estudiantes que "siempre se ha pensado que la inteligencia está directamente relacionada con el tamaño del cerebro, pero en realidad la inteligencia es una mera cuestión de velocidad en el procesamiento de la información".
EL INTERCAMBIO DE INFORMACIÓN HACE "QUE SEAMOS LA ESPECIE DOMINANTE"
Por otro lado, en una entrevista concedida a Europa Press, Bermúdez de Castro ha afirmado que "la unidad, el hecho de que seamos muchos, que intercambiemos información, que formemos un cerebro colectivo, es lo que ha hecho que seamos la especie dominante hoy día sobre el planeta".
De hecho, el también codirector de las excavaciones e investigaciones en los yacimientos de la sierra de Atapuerca (Burgos) ha considerado que "si no fuera así, o sea, si fuéramos los que éramos hace 100.000 años, seguiríamos siendo cazadores y recolectores y ni siquiera se habría inventado el Neolítico, es decir, la agricultura y la ganadería".
Sobre los motivos por los que la especie humana ha evolucionado de esta manera, ha considerado que aunque "algunos genetistas, seguramente con toda razón, opinan que hay genes que han mutado", lo que ha provocado que los Homo Sapiens tengan cambios con respecto a los Homo Erectus o los Neandertales --como tener pensamiento simbólico--, eso "no ha sido suficiente como para poder llegar a las cotas tecnológicas que tienen las naciones de hoy en día que estamos bien desarrollados".
"Estamos llegando a otros planetas, tenemos todo tipo de artilugios. En fin, no paramos los tsunamis, pero hacemos cosas que eran impensables hace tan solo unas décadas", ha relatado. Por ello, ha valorado que "lo fundamental" para explicar este proceso es la unidad de la especie humana.
"EL CEREBRO SE HA HECHO CADA VEZ MÁS COMPLEJO"
Bermúdez de Castro ha señalado que "el cerebro se ha hecho cada vez más complejo porque no todo es una cuestión de tamaño, es también una cuestión de complejidad", además de la influencia de la genética y el ambiente. En este sentido, ha recordado que los Neandertales tenían un cerebro mayor que el de los Homo Sapiens, "y sin embargo nosotros, que tenemos un cerebro más pequeño, somos los que estamos hoy día aquí".
Tal y como ha relatado, durante "la mitad de los siete u ocho millones de años que llevamos evolucionando" en el planeta tras la divergencia con los chimpancés, el cerebro humano "se mantuvo prácticamente igual, no hubo cambios, vivíamos en un ambiente bastante estable y la evolución no afectó absolutamente para nada".
"No hay evidencias científicas y, aparte, el registro fósil es tan escaso que no permite hacer hipótesis", ha expresado. Esta situación cambió con los cambios climáticos del Pleistoceno, que tuvo como consecuencia un "enfriamiento global del planeta". En concreto, Bermúdez de Castro se ha referido a los cambios ambientales en las zonas pobladas, como el desierto del Sáhara y las sabanas, donde "empezamos a vivir".
SE HA MULTIPLICADO POR TRES LA CAPACIDAD CEREBRAL EN 4 MILLONES DE AÑOS
Asimismo, ha repasado la evolución desde ese momento, en el que la especie humana empezó a "cazar o bien a carroñear" y a "organizase mejor" con estrategias para conseguir al alimento, lo que, desde su punto de vista, influyó "seguramente en la selección de individuos cada vez más inteligentes y, por lo tanto, con un cerebro más grande". A esta situación, el experto ha añadido la aparición de la industria lítica, con herramientas como la pinza de precisión.
"Todo eso hizo que el tamaño cerebral se disparase de una forma tremenda. Pasamos de los 400 centímetros cúbicos en muy poco tiempo a los 600-700, que fue un incremento bastante grande. Y ese incremento se ha mantenido hasta la actualidad", ha concretado Bermúdez de Castro.
Del mismo modo, ha explicado que "tenemos cráneos de 200.000 años aproximadamente que ya son exactamente igual que nosotros", lo que significa que "podemos decir que la especie humana tiene 200.000 años de antigüedad, si no 300.000". Así se ha referido en lo relativo al hallazgo en Jebel Irhoud (Marruecos) de huesos fósiles de Homo Sapiens de esa antigüedad y que representan la evidencia fósil más antigua datada con certeza de nuestra especie.