SANTANDER 7 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Parque de la Naturaleza de Cabárceno ha recibido a una gorila de 7 años, llamada Xetsa, procedente del Zoo de Frankfurt (Alemania) para su reproducción en la instalación cántabra.
Xetsa llegó a Cabárceno el pasado 25 de febrero y su traslado se enmarca en el Programa Europeo de Protección de Especies en Peligro de Extinción (EPP, por sus siglas en inglés) de Gorilas, que vuelve a apostar por el parque "como referente de la reproducción de esta especie", ha explicado el Gobierno.
La gorila se une así a los otros cinco que conforman la familia de Cabárceno: tres hembras (Chelewa, Gwet y Moja) y dos machos (Niky, el macho espalda plateada, y Kibwe).
El traslado de Xetsa a Cantabria se basa en los protocolos que buscan la garantía genética de reproducción de la especie, dado el interés genético de Niky, que ya tiene tres descendientes.
Tras el prudencial tiempo de adaptación en la zona de cuarentena, la nueva inquilina se irá adaptando poco a poco al grupo reproductor y a su nueva casa, donde podrá disfrutar de unas instalaciones, tanto interiores como exteriores, de 14.500 metros cuadrados.
Como es habitual en el manejo e integración de los ejemplares de esta especie, la gorila ha pasado los primeros día de estancia en Cabárceno en la zona reservada, desde donde ha podido mantener contacto visual, auditivo, olfativo y táctil con el resto de ejemplares para ir conociéndose.
Tras ese primer periodo de integración, Xetsa ha iniciado esta semana las primeras interacciones con el macho espalda plateada, quien la ha aceptado.
Después de esta aceptación, la recién llegada también interactúa con el resto de hembras, especialmente con Chelewa, la dominante. Estos comportamientos se continuarán produciendo en los próximos días hasta definir los rangos de dominancia en el grupo.
En lo que se refiere a cuidados veterinarios, Xetsa se someterá a pruebas de funcionalidad cardiaca debido a que tiene antecedentes familiares con problemas de esta índole.
El estudio y las exploraciones se abordarán desde un punto de vista multidisciplinar en el que se incluye la participación de cuidadores, veterinarios y técnicos especializados como especialistas en imagen y médicos cardiólogos, ya que los primates comparten el 98% del ADN con los humanos.