El conductor del accidente mortal de Castelar colisionó con la moto a 97 km/h, el doble de lo permitido

Archivo - Flores en la calle Castelar de doble sentido donde el 3 de febrero se produjo un atropello mortal a un motorista de 19 años
Archivo - Flores en la calle Castelar de doble sentido donde el 3 de febrero se produjo un atropello mortal a un motorista de 19 años - Juan Manuel Serrano Arce - Europa Press - Archivo
Publicado: lunes, 19 junio 2023 19:30


SANTANDER, 19 Jun. (EUROPA PRESS) -

El conductor del Audi que colisionó la noche del pasado 3 de febrero en la calle Castelar de Santander contra un motorista de 19 años, que falleció en el acto, iba a 97 kilómetros por hora en el momento del impacto, casi el doble de la velocidad permitida (50 kilómetros por hora).

Así se recoge en el informe pericial del equipo de reconstrucción de accidentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, al que ha tenido acceso Europa Press, que indica además que poco antes de la colisión, a 143 metros del impacto, el vehículo que conducía Bryan.B., de 26 años, circulaba a 136,8 kilómetros por hora.

El coche venía del túnel del Centro Botín, donde la velocidad está limitada a 40 kilómetros por hora, pero su velocidad media dentro del mismo era de entre 121 y 128 kilómetros por hora. A continuación, ya en el Paseo de Pereda, limitado a 50 km/h, circulaba a 84 kilómetros en un primer tramo y a 111 en un segundo tramo.

El informe, tal y como recogió en su día el atestado de la Policía Local de Santander, confirma que el vehículo, un Audi A-4, venía derrapando antes de colisionar con el ciclomotor conducido por el fallecido, que circulaba a 44 kilómetros por hora.

El Audi, tras pasar por la glorieta de Puertochico y acceder al carril izquierdo de la calle Castelar en sentido hacia El Sardinero se salió parcialmente de la vía y circuló entre ambas calzadas, con la parte inferior del coche rozando con la mediana elevada. En este tramo de 31,4 metros hizo maniobras de contravolante.

Posteriormente volvió a su carril de circulación pero siguió perdiendo el control durante 45 metros. Entonces se salió de la vía por el margen izquierdo, invadiendo el carril izquierdo en sentido contrario (hacia la glorieta de Puertochico), con pérdida de control y giro hasta el impacto.

Tras chocar con el ciclomotor, conducido por el joven fallecido, el santanderino Bret Elorza, el turismo continuó girando y, en toda esta trayectoria, recorrió una distancia de 143 metros.

Sin embargo, en la declaración realizada por Bryan B. el 7 de febrero ante el titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Santander, --que le envió a prisión junto a un segundo conductor supuestamente implicado, que posteriormente fue puesto en libertad bajo fianza--, dijo que creía que "no podía ir a más de 70" kilómetros/hora y que, al subirse a la mediana de Castelar, intentó "frenar" pero el coche no le respondió.

Junto a las conclusiones sobre la velocidad a la que circulaba, el informe de la Guardia Civil indica que la prueba de alcohol en sangre del acusado arrojó un resultado de 0,4 gr/l, casi el doble del 0,25 con el que se da positivo. Además, la prueba de laboratorio resultó positiva en cocaína y benzoilecgonina.

Frente a ello, el conductor, que está acusado de un supuesto delito de homicidio por imprudencia y de dos contra la seguridad vial (uno por conducción temeraria y otro por conducir bajo la influencia de alcohol o drogas), aseguró en su declaración judicial que había tomado tres cervezas y que "no consume drogas".

SEGUNDO CONDUCTOR

El informe se refiere también al segundo conductor, Adrián B., acusado de dos supuestos delitos contra la seguridad vial (por conducción temeraria y por conducir bajo la influencia de drogas), y otro de cooperador necesario de homicidio por imprudencia, y señala que la velocidad del Volkswagen Golf en el que circulaba antes de frenar de emergencia, era de 114 kilómetros por hora, frente a "los 50 o 60" que dijo en su declaración judicial.

El documento de la Guardia Civil indica que, "a pesar de no estar implicado", este conductor, que circulaba por el carril derecho del sentido Sardinero, realizó una maniobra de frenada "severa", hasta detenerse próximo a la posición final del fallecido.

Sobre el consumo de sustancias en este caso, el informe reafirma el resultado negativo de la prueba de alcoholemia y el positivo en varios estupefacientes, que ahora concreta: cocaína, benzoilecgonina y THC (cannabis).

Este conductor fue puesto en libertad bajo fianza de 4.000 euros, al considerar el juez que no existía riesgo de fuga.

En su declaración judicial al día siguiente del accidente, ambos negaron que "se picaran" entre ellos antes de ocurrir el siniestro, pese a que las diligencias judiciales apuntaban indicios en este sentido.