Álvarez dice que Carrancio es "un tránsfuga de Wikipedia"
SANTANDER, 9 Nov. (EUROPA PRESS) -
El portavoz de Ciudadanos en Cantabria, Félix Álvarez, ha condicionado el apoyo de esta formación a los Presupuestos Generales de Cantabria (PGC) de 2018 a que el Gobierno PRC-PSOE cumpla lo pactado con Cs para la aprobación del Presupuesto de 2017, a que no negocie con tránsfugas, y a que no se produzca una subida de impuestos.
"Si el Gobierno del señor Revilla quiere sentarse a negociar los presupuestos de 2018 con nosotros, primero, que se comprometa públicamente a no negociar con un tránsfuga; segundo, todavía están a tiempo de cumplir aquellos puntos del pacto que no han cumplido; y tercero, no vamos a apoyar ningún presupuesto que implique subida de impuestos, que permita al Gobierno seguir metiendo, con más ahínco, la mano en el bolsillo de todos los cántabros; no vamos a apoyar ningún presupuesto que sólo pretende equilibrar sus cuentas a costa de exprimir a los ciudadanos en vez de racionalizar el gasto público que sigue aumentando de manera desbocada".
Así lo ha dicho Álvarez en una rueda de prensa en la que ha estado acompañado por el portavoz parlamentario de la misma formación, Rubén Gómez, y en la que ha insistido en que Ciudadanos "siempre" ha estado dispuesto al diálogo, la negociación y a procurar estabilidad "pero no a cualquier precio".
El diputado nacional ha advertido que la política impositiva que planea el Gobierno va a suponer "un sablazo" para la "mayoría" de los cántabros, "meticulosamente planeado desde hace tiempo", y que no pudo aprobar en 2017 por el "freno" de Ciudadanos.
"Que no engañen a los hombres y mujeres de Cantabria. Estos presupuestos suben los impuestos. Aumentan el Impuesto de Sucesiones a partir de 60.000 euros, es decir, a la inmensa mayoría de estas transacciones. Aumentan el impuesto de Patrimonio. Aumentan las tasas públicas. Aumentan el Impuesto sobre las Trasmisiones Patrimoniales Actos Jurídicos Documentados. Y casualmente, reducen el impuesto de donaciones tal y como predijo, tal y como reclama el tránsfuga", en alusión de Juan Ramón Carrancio.
Álvarez ha acusado al Gobierno de vivir "en Narnia", dibujando un escenario "idílico" de la comunidad cuando ésta duplicó en 2016 el objetivo de déficit, es "líder en destrucción de empleos netos", el Ejecutivo "gasta sin control", y su deuda alcanzó los 3.045 millones en el segundo trimestre.
El portavoz también ha acusado a la Administración de Revilla de haber incumplido en algunos casos "de forma consciente" varios puntos fundamentales, "de gran trascendencia para los cántabros", de los 80 que contemplaba el acuerdo con Cs para la aprobación de los presupuestos regionales de 2017.
Álvarez ha citado 15 incumplimientos, entre ellos la gratuidad de los libros de texto en Educación Primaria, punto en el que el Gobierno ha ofrecido "excusas peregrinas y vergonzosas"; la reducción de las empresas públicas al menos un 25% puesto que hay algunas "prescindibles", otras que no tienen ninguna actividad o la duplican y algunas que "sólo funcionan como empresas de contratación, que todos los cántabros pagamos"; y la revisión del plan energético. Tres casos que, en su opinión, el Gobierno "nunca tuvo la más mínima intención de cumplir".
Tras la reunión de revisión del acuerdo entre Gobierno y Cs celebrada ayer por la tarde, y que según el primero se ha saldado con un cumplimiento del 85%, Álvarez ha censurado que el Ejecutivo adujera "cuestiones subjetivas" cuando hay medidas cuya aplicación se pueden verificar.
Es el caso de la petición de Cs del pago de la mutualidad deportiva de los niños de familias numerosas o bajos recursos económicos, que según el Gobierno se ha hecho pero que no consta en la Federación Cántabra de Fútbol, que no ha recibido dinero por este concepto, ha indicado el diputado, que ha censurado la "mentira flagrante" del Ejecutivo, que durante la reunión de ayer no se pronunció sobre un posible acuerdo con Cs de cara a los PGC. "No nos han dicho nada", ha reconocido Álvarez
"UN TRÁNSFUGA DE WIKIPEDIA"
El último punto que exige la formación naranja para abordar su apoyo a los presupuestos de 2018 es que el Gobierno no negocie con tránsfugas. Especialmente, sin citarlo, Álvarez se ha referido a su antecesor en el cargo en Ciudadanos, Juan Ramón Carrancio, a quien ha definido como "un tránsfuga de libro, de Wikipedia. Incluso se permite la licencia de crear un partido nuevo al tiempo que cobra un sueldo público por haber salido elegido al ir en las listas de otro", ha enfatizado.
Álvarez ha censurado que en el Pleno del Parlamento del pasado lunes no escuchó a Revilla "no comprometerse a no dialogar ni a pactar los presupuestos con el tránsfuga". Tras recordar numerosos dichos del presidente cántabro en contra de esta práctica, le ha advertido que si tiene "la tentación de negociar con un tránsfuga, la maldita hemeroteca le dejará en el lugar que le corresponde".
"El PRC y el PSOE también han dicho que van a sentarse a negociar con todos, sin excepción, y Ciudadanos no se puede sentar a negociar con ningún Gobierno que tenga la desvergüenza de equiparar a un tránsfuga con el resto de representantes políticos. Por dignidad, por respeto a la decisión democrática de los ciudadanos, no podemos hacerlo y no lo vamos a hacer", ha asegurado.