La directora del Instituto de la Mujer aboga por romper el "círculo perverso" que coloca a la mujer en una posición de inferioridad
SANTANDER, 1 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Delegada del Gobierno para la Violencia de Género, Rebeca Palomo, ha hecho un llamamiento a "prevenir" la violencia de género desde la coeducación. "Debemos partir desde la igualdad de género, del reconocimiento de los mismos derechos para hombres y mujeres y hacerlo desde una perspectiva de derechos humanos", ha apuntado.
Así lo ha expresado Palomo durante su intervención en la mesa redonda 'Políticas públicas de Igualdad en el ámbito internacional y nacional' que se integra en el curso 'Aulas para la igualdad: El valor de coeducar' organizado por la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP).
Palomo ha matizado que la coeducación se entiende como la educación dirigida a "eliminar los estereotipos por razón de sexo, eliminando situaciones de desigualdad y jerarquías culturales sexistas".
Para ello, la delegada del Gobierno para la Violencia de Género ha animado a los profesores a desarrollar "estrategias y programas que contribuyan a la coeducación", así como a establecer "nuevos patrones de conducta entre hombres y mujeres que contribuyan a la igualdad".
A su juicio, una de las "prioridades" para la igualdad de género es "prevenir y luchar" contra la discriminación por razón de género, cuya manifestación más grave, según ha asegurado, es la violencia. "Debemos establecer nuevos seguimos roles y estereotipos de género así como patrones socioculturales tanto de cultura como de relación entre hombres y mujeres", ha explicado.
Palomo ha destacado que compromisos internacionales como la Agenda 2030 y los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) que establecen las "pautas" y el "marco" para lograr la igualdad de género y el empoderamiento de la mujer, incluidos en el objetivo número 4 sobre la educación inclusiva, de equidad y de calidad.
Asimismo, ha recordado que el Convenio del Consejo de Europa sobre prevención y lucha contra la violencia contra la mujer y la violencia doméstica (Convenio de Estambul) tiene como objetivo proteger a todas las mujeres contra todas las formas de violencia y prevenir, perseguir y eliminar la violencia contra las mujeres.
A nivel nacional, la delegada del Gobierno se ha referido al Pacto de Estado contra la Violencia de Género que, asegura, "es el resultado del consenso de todas las fuerzas política para situar la violencia de género como una cuestión de estado y el centro de las políticas públicas".
Dentro del pacto, que se compone de un total de nueve ejes, ha subrayado la importancia del eje que se refiere a la educación en materia de violencia de género mediante la "ruptura del silencio", así como la "sensibilización" y la "prevención" de la violencia de género.
Para ello, el pacto incluye medidas en el ámbito educativo como la de incluir formación en todas las tapas educativas, la prevención de la violencia de género, el machismo y las conductas violentas o la promoción de la educación emocional, sexual e igualitaria.
EL ROL DE LOS PROFESORES EN LA VIOLENCIA DE GÉNERO
Además el pacto contra la violencia de género contempla que en los consejos escolares de los centros haya un profesor de coeducación, "encargado de fomentar medidas educativas que promuevan la igualdad y prevengan la violencia".
En este aspecto, ha señalado que los educadores deben conocer los primeros signos de violencia de género que pasan desde ignorar, despreciar, amenazar, ridiculizar ú obligar a tener relaciones sexuales a los estudiantes y ha incidido en nuevas formas de violencia ligadas a las nuevas tecnologías. "Las que más se repiten son controlar la manera de vestir o el acceso a las redes sociales que pueden llevar a suplantaciones de identidad o a pedir la localización de las jóvenes", ha explicado.
Del mismo modo, ha recordado a los docentes la existencia de un protocolo común de actuación sanitaria para hijos e hijas de mujeres victimas de violencia de género que, según ha asegurado, "se puede detectar a través del comportamiento de los niños".
"Si tienen trastornos de sueño, alimenticios, dificultades de aprendizaje, más allá de que puedan ser conflictivos pensar que puede haber otra causa que subyace y los profesores pueden ser una vía para detectarlo", ha apuntado.
Además, ha recordado a los docentes que los delitos de violencia de género están tipificados como delitos públicos por lo que, ante cualquier sospecha, "se debe denunciar a las autoridades", ha recalcado.
ROMPER EL CÍRCULO PERVERSO
Por su parte, la directora del Instituto de la Mujer, Rocío Rodríguez, ha enfatizado que "la escuela debe dedicarse a destruir los géneros" pues, a su juicio, "seguimos siendo sexistas".
En su intervención, Rodríguez ha destacado programas llevados a cabo por el Instituto de la Mujer en colaboración con el Gobierno y, en concreto, ha resaltado el programa 'Quiero ser ingeniera' en el que alumnas de distintas universidades acuden a colegios para trabajar en un proyecto digital con alumnas más jóvenes de diferentes escuelas.
En materia de coeducación, ha señalado que el instituto se encuentra trabajando en un programa destinado a profesores y adolescentes y ha asegurado que continuarán colaborando con el Ministerio de Educación con el objetivo de llevar a cabo "programas más ambiciosos".
Por último, Rodríguez ha aludido al "círculo perverso" que coloca a la mujer en una posición de inferioridad. "Tenemos que pensar qué tenemos que hacer, qué no hemos hecho y qué podemos hacer para romper el círculo perverso y escarbar en los pliegues que nos dificultan avanzar en la igualdad entre mujeres y hombres", ha concluido.