Probada por 38 voluntarios, consumidores habituales de vino tinto, que durante tres semanas sacaron fotos de las copas antes de su consumo
LOGROÑO/SANTANDER, 31 Oct. (EUROPA PRESS) -
Un equipo de investigación, integrado entre otros por miembros del el Instituto de Física de Cantabria, ha desarrollado una herramienta basada en la Inteligencia Artificial que permite cuantificar la cantidad de vino servido en una copa y, de forma indirecta, estimar sus compuestos bioactivos, a partir de una simple fotografía tomada con un teléfono móvil. Esta herramienta ayudará a una evaluación más precisa de los patrones de consumo de vino en estudios epidemiológicos y poblacionales.
El equipo -integrado por investigadores del Instituto de Ciencias de la Vid y el Vino (ICVV) en colaboración con el Instituto de Investigación en Ciencias de la Alimentación (CIAL), el Centro de Investigación Biomédica de La Rioja (CIBIR) y la Universidad de La Rioja, además del IFCA- ha publicado los resultados en la revista Heliyon.
Aplicando un método de Inteligencia Artificial (aprendizaje profundo o deep learning), los científicos han desarrollado una herramienta digital de análisis de imagen capaz de determinar, a partir de una fotografía tomada con el teléfono móvil, el volumen de vino tinto que contiene una copa o vaso.
Establecer con precisión esta cantidad "es imprescindible para estimar la ingesta de sus compuestos bioactivos (fundamentalmente polifenoles), asociados con la prevención de determinadas enfermedades crónicas de alta incidencia, siempre en el marco de un consumo moderado y asociado a un estilo de dieta mediterránea", indica la investigadora del ICVV María José Motilva.
Este tipo de herramientas serán de utilidad para evaluar los patrones alimentarios de una determinada población, teniendo en cuenta la cantidad consumida de cada componente de la dieta, en este caso, de vino.
Hasta ahora, la manera más común de recoger esta información en estudios con consumidores es a través de los llamados Cuestionarios de Frecuencia de Consumo de Alimentos (FFQs). En los FFQs se solicita a cada participante que indique las veces que toma un determinado alimento (por ejemplo, cuántas copas de vino al día/semana/mes).
Sin embargo, estos cuestionarios consideran un peso o volumen ya predefinido para cada alimento, "lo que supone una infra o sobreestimación de la ración -explica Motilva-, dificultando el cálculo preciso de la ingesta diaria de macro y micronutrientes y, en consecuencia, de la calidad de la dieta.
Este problema es especialmente importante en el caso del vino, ya que los cuestionarios estandarizan una ración (copa o vaso) a 100 mL, lo que no siempre se corresponde con la realidad".
38 VOLUNTARIOS, CONSUMIDORES DE VINO TINTO, DURANTE 3 SEMANAS
La nueva herramienta ha sido puesta a prueba mediante un estudio en el que han participado 38 voluntarios, consumidores habituales de vino tinto, que durante tres semanas fueron sacando fotos, con sus móviles, de las copas o vasos antes del momento de su consumo.
"El sistema demostró una buena precisión en el cálculo del volumen de vino tinto a partir de fotografías tomadas en situaciones reales de consumo, permitiendo estimar una media de 114 33 mL por copa (dependiendo del formato de esta)", afirma la investigadora.
Esta herramienta de análisis de imagen se ha mostrado útil para la evaluación precisa de los patrones de consumo de vino y en consecuencia de la ingesta de sus polifenoles, principales componentes bioactivos. Además, esta herramienta podría tener también aplicación en estudios de mercado y de percepción de los consumidores.