SANTANDER, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los nueve diputados del PP cántabro que hasta ahora se han opuesto al cambio de portavoz parlamentario que pretende la dirección, para que Eduardo Van den Eynde sea sustituido por la nueva presidenta del partido y del grupo, María José Sáenz de Buruaga, aceptarían tal cambio si "agotadas todas las vías" -internas y externas si procede- tienen la "garantía" de que dicha decisión no es "contraria" a los reglamentos y estatutos de la formación.
"Si una vez agotadas todas las vías -en las que defenderemos nuestros postulados, coincidentes con los informes jurídicos que hemos recabado- se dictaminase por la instancia competente que tales acuerdos son conformes a derecho, nos someteríamos a los dictados del Comité Ejecutivo (que acordó el relevo en la portavocía), pues solo en dicho caso tendríamos la garantía de estar actuando conforme a los que dispone nuestra propia normativa de organización".
Así lo aseguran en un comunicado, firmado por los nueve parlamentarios afines al expresidente 'popular', Ignacio Diego, y contrarios a la directiva encabezada por Sáenz de Buruaga, que ganó por cuatro votos el Congreso Regional de marzo, cuya anulación han solicitado los 'dieguistas' en los tribunales.
En concreto, el escrito --difundido este viernes a los medios, después de que el Comité Ejecutivo decidiera anoche trasladar al Comité Nacional de Derechos y Garantías la situación para que aplique los estatutos "hasta las últimas consecuencias", que sería la expulsión del PP-- está rubricado además de por Diego y Van den Eynde, por Luis Carlos Albalá, Ruth Beitia, José Manuel Igual, Cristina Mazas, Santiago Recio, Francisco Rodríguez y Mercedes Toribio.
Los otros cuatro parlamentarios -Ildefonso Calderón, Isabel Urrutia, Iñigo Fernández y la propia Sáenz de Buruaga- sí apoyan el cambio de portavoz del PP en la Cámara.
SUCESIÓN DE HECHOS
En el documento remitido por los nueve diputados hasta ahora contrarios al cambio relatan los hechos que se han sucedido desde que se planteó el relevo de Van den Eynde por Sáenz de Buruaga.
Según aseguran, tras el XII Congreso Regional del 25 de marzo, el 8 de mayo se celebró la "primera" reunión convocada por la nueva presidenta del PP para abordar la reorganización del grupo parlamentario, reunión en la que Sáenz de Buruaga propuso "únicamente" el cambio de portavoz y se postuló "ella misma" para el cargo.
Pero como la "amplia mayoría" de los parlamentarios expresó su opinión contraria al cambio, la líder del partido solicitó "suspender" el encuentro para "reflexionar" sobre las cuestiones planteadas.
Así, se convocó una nueva reunión tres días después, el 11 de mayo, a la que no acudieron el portavoz ni otro diputado, según indican los 'dieguistas'. En esa segunda cita se solicitó la firma de un documento para designar a Sáenz de Buruaga portavoz, "sin explicaciones ni comunicaciones previas", que fue rubricado por "tres" miembros del grupo.
"El resto", explican, "aunque no estábamos de acuerdo políticamente con la decisión que se pretendía adoptar, dejamos claro el motivo fundamental para tal negativa": que dicha decisión era "contraria a los reglamentos y estatutos de nuestro partido".
En este sentido, los nueve 'populares' aclaran que su "obligación" es "cumplir" con las reglas internas, así como con las directrices de los órganos de gobierno del partido, pero "siempre" que éstas sean "acordes a las normas de funcionamiento de las que democráticamente nos hemos provisto".
Sin embargo, lamentan, el mismo 11 de mayo "por la tarde", y sin más diáologo, se trasladó a los medios de comunicación y al Comité Ejecutivo Regional que "parte de los miembros del grupo parlamentario estábamos bloqueando el nombramiento de la presidenta como portavoz".
"Días después" -prosiguen- recibieron la comunicación de la ejecutiva para que firmasen la designación de Sáenz de Buruaga, a lo que se opusieron porque los informes jurídicos interpretaron que dicho acuerdo "vulnera" los estatutos, el reglamento de organización del PP y el reglamento del grupo parlamentario, como se trasladó al Comité Ejecutivo.
Tras esto, se convocó una nueva reunión del órgano, teniendo en cuenta también el recurso del portavoz que alertaba de que el acuerdo no era válido porque no estaba incluido en el orden del día, como es preceptivo.
ERRORES
A juicio de los nueve diputados, estos "errores sucesivos" del Comité están suponiendo un "grave perjuicio a la imagen" del PP cántabro y confirman, además, la "falta de rigor" en la aplicación de reglamentos y estatutos por parte de la nueva dirección.
Y en línea con lo anterior, lamentan la "estrategia" del equipo de Sáenz de Buruaga basada -dicen- en una "continua aparición en los medios, en las que se filtran los debates y asuntos internos", contribuyendo así al "descrédito" de la formación.
Los 'dieguistas' contraponen la actitud del grupo, y destacan al respecto que "siempre ha intentado dilucidar este conflicto de competencias en el seno de los órganos competentes", al considerar -recalcan- que las "discrepancias" sobre normas internas se deben "debatir y dialogar" en el PP. Pese a ello, se quejan de que nadie de la dirección ha contactado con ellos para "escuchar" el porqué de su postura, ante unos acuerdos que consideran "antirreglamentarios y antiestatutarios".
"Continuaremos defendiendo las normas de las que democráticamente nos hemos provisto en el PP, defensa que realizaremos en los órganos internos del partido y en las instancias que sean oportunas", avisan los nueve diputados 'populares' que, para finalizar, aclaran que "ninguno" pone "en duda" que la presidenta del PP lo es también del grupo y como tal ostenta la "máxima representación y la dirección política" en el mismo.
"Desde el primer momento nos hemos puesto a su disposición para el mejor cumplimiento de estas funciones", concluyen.