Félix de Azúa: El 'boom' latinoamericano "destruyó la división cainita" de los escritores españoles

   Por la tarde, en los 'Martes Literarios', ha lamentado la "ruptura total" entre los jóvenes y los "maestros" de la literatura

   SANTANDER, 18 Jul. (EUROPA PRESS) -

   El escritor y académico de la Real Academia Española de la Lengua (RAE) Félix de Azúa ha asegurado este martes en Santander que la "avalancha maravillosa" que supuso la llegada a Barcelona de los autores del 'boom' latinoamericano --como Julio Cortázar, Mario Vargas Llosa, Gabriel García Márquez, Juan Rulfo, Ernesto Sábato, Octavio Paz o Alejo Carpentier, entre otros-- "destruyó la división cainita" que había en España entre autores de derechas y de izquierdas.

   Así, ha asegurado que debido a que en este grupo de autores había tanto figuras de derechas --Jorge Luis Borges--, como de izquierdas --García Márquez o Cortázar--, su "unidad" lo "cambió todo", tal y como ha señalado durante su intervención este miércoles en el encuentro 'El espacio cultural iberoamericano' en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP).

   "De pronto, es como si nos hubieran dado permiso para dejar de matarnos" en el terreno literario y "empezar a escribir en serio", ha señalado De Azúa, quien ha añadido que "fue la avalancha maravillosa de talentos" americanos a comienzos de la década de 1960 la que "nos permitió convivir" a los españoles.

   En esa época, ha recordado el académico de la RAE, trabajaba con Carlos Barral en la editorial Seix Barral y se publicaron en siete u ocho años "obras maestras" de todos estos autores latinoamericanos. "Es una enormidad lo que recibimos en un fragmento de tiempo muy denso", ha apostillado.

DIVISIÓN ENTRE ESCRITORES DEL "SECTOR OFICIAL Y TODO LO DEMÁS"

   En su opinión, a partir de la llegada a Barcelona de los autores latinoamericanos empiezan a aparecer "grandes novelas" y "a nadie le importa" si son de derechas o de izquierdas. Y ha puesto de ejemplo 'La verdad sobre el caso Savolta' (1975), del Premio Cervantes 2016 Eduardo Mendoza. "Todos respiramos con esa novela", ha manifestado.

   De Azúa ha recordado también que durante la década de 1960 se vivía "en un país atroz" en el que la literatura española "estaba perfectamente dividida entre el sector oficial y todo lo demás", que, a su vez, estaba dividido "entre los que pertenecían al Partido Comunista y todos los demás".

   En este aspecto, por la mañana y por la tarde ha contado una anécdota protagonizada por el escritor andaluz Alfonso Grosso sobre los escritores pertenecientes al Partido Comunista. Según el testimonio de De Azúa, llegó un momento en el que Grosso "se hartó" de la situación, precisamente, por la "influencia" de los autores latinoamericanos.

   Tal y como ha explicado el académico, Grosso dijo en una reunión que mientras que en España se "obedecía" lo que decía Juan Goytisolo, el propio Goytisolo "escribía bien" en París.

"NUNCA HE SIDO UN PROFESIONAL" DE LA LITERATURA

   Por la tarde, en su intervención en la cita de los 'Martes Literarios', Félix de Azúa también ha recordado su discurso matinal, se ha calificado como un "enfermo" de la literatura.

   "Nunca he sido un profesional de la literatura", ha reconocido, sin embargo, el autor, que tiene publicados unos 40 libros. "He visto trabajar a Mario Vargas Llosa y sé lo que es un profesional de la literatura, es tremendo", ha añadido, al tiempo que ha incidido en que "tampoco" ha tenido la pretensión "de alcanzar cotas sublimes".

   Por otro lado, ha asegurado que "la poesía es la que te elige, no eres tú el que elige la poesía" porque "la poesía de verdad ni siquiera se piensa, ni siquiera se escribe", al tiempo que ha comentado en su caso personal "no ha podido jamás medir las sílabas" golpeando sobre la mesa, como hacía el poeta alemán Friedrich Hölderlin.

"ES MUY DIFÍCIL QUE LA POESÍA NO TE DESTRUYA"

   El escritor, en otro orden de cosas, ha aseverado que "es muy difícil que la poesía no te destruya". "La poesía va en serio y, desde luego, no consiste en contar sílabas", ha apuntado.

   Y también que ha recordado la figura de Leopoldo María Panero o de Claudio Rodríguez, "que lo han pasado muy mal", que acabaron "destruidos". Por eso, ha asegurado que "abandonó la poesía" porque la poesía lo había "abandonado" a él.

   Félix de Azúa es uno de los autores incluidos en 'Los Nueve novísimos poetas españoles' (1970), antología coordinada por Josep María Castellet --junto a Manuel Vázquez Montalbán, Leopoldo María Panero, Antonio Martínez Sarrión, José María Álvarez, Pere Gimferrer, Vicente Molina Foix, Ana María Moix y Guillermo Carnero--. Sobre este libro, ha recordado que los escritores que participaron recibieron "una tunda", pero ha resaltado que la antología "todavía se vende, es una cosa extraordinaria".

   Finalmente, ha lamentado que los jóvenes "ya no se acercan a los maestros" porque "se ha producido una ruptura total". "Los que vivimos una época en la que podíamos llamar tranquilamente a (Juan) Benet, se acabó. Cuando podíamos llamar a Agustín García Calvo. Eso ha desaparecido", ha dicho.